Denuncian que mafias roban perros para usarlos para entrenar a canes de pelea
El director de la escuela de Educadog, Edison Achorte, indicó que este oscuro negocio conocido como "sparring canino" es ofrecido y opera a través del internet
La modalidad del sparring canino se está volviendo cada vez más frecuente en el país. Personas inescrupulosas se dedican a robar perros para usarlas como entrenamiento de canes de pelea.
En diálogo con Canal N, el director de la escuela de Educadog, Edison Achorte, dijo que estas mafias usan a animales domésticos para dárselos a perros pitbulls y otros de raza peligrosa como entrenamiento.
En esa línea, el instructor de estos animales indicó que este oscuro negocio conocido como "sparring canino" es ofrecido y opera a través del internet.
Asimismo, contó que esta modalidad se trata de robar perros a personas que están paseando a sus mascotas y se los entregan a estos canes que han sido inyectados con anabólicos y sometidos a una serie de entrenamientos ilegales.
“Todos los canes pueden ser rehabilitados”
Edison Achorte remarcó que los perros que han sido adiestrados cruelmente pueden ser rehabilitados.
El director de la escuela Educadog indicó que cuando pierden estos perros de pelea los abandonan en sitios descampados y a su suerte.
“Cuando vienen aquí, nosotros hacemos un proceso de adiestramiento. Le enseñamos obediencia con su bozal respectivo, pero con previa evaluación”, precisó.
“Todos los perros pueden ser rehabilitados y salvados, incluso de ser sacrificados”, continuó.
Reglas y límites
Posteriormente, pidió a los dueños “dejar de humanizar a los perros” y acotó que si no corrigen el mal comportamiento “será difícil su rehabilitación”.
“Ese daño que le hacen al perro de no corregir y no educarlo es fatal porque después viene el sacrificio y lamentaciones”, sostuvo
“Mientras uno tolere la malcriadez del perro esto se prolonga. El perro no sabe y se deja llevar por tal como tú lo eduques”, continuó.
Tips
Por último, Edison Achorte señaló que el "mejor tip” es sacarlo a pasear al perro. “Si uno lo tiene encerrado o amarrado a un sitio es difícil que el perro se rehabilite”, argumentó.