Designan a Manuel Balladares tras renuncia en Migraciones
El Gobierno aceptó la renuncia de Armando García al cargo de superintendente nacional de Migraciones. La salida fue oficializada mediante resolución firmada por el presidente de la República y el ministro del Interior. De inmediato, se designó a Manuel Alberto Balladares Ramírez como nuevo titular de la entidad, en calidad de funcionario de confianza.
La decisión se da tras semanas de cuestionamientos al exsuperintendente, particularmente desde el gremio de transportistas, que habían exigido su salida en reuniones con el ministro del Interior, Vicente Tiburcio. Según indicaron, bajo su gestión se habría permitido el ingreso de extranjeros con antecedentes policiales que habrían terminado vinculados a organizaciones criminales.
Cambios tras presión gremial y contexto de inseguridad
La salida de García ocurre en un contexto marcado por preocupaciones sobre el control fronterizo y los procedimientos migratorios. Transportistas habían denunciado públicamente que la falta de filtros efectivos estaba facilitando el ingreso de personas con historial delictivo, lo que agravaba los casos de extorsión en el sector transporte.
La renuncia, según fuentes oficiales, fue aceptada rápidamente por el Ejecutivo, que nombró a su reemplazo conforme a lo establecido en la Ley Orgánica del Poder Ejecutivo. Al tratarse de un cargo de confianza, el nombramiento se formaliza mediante resolución suprema refrendada por el presidente y el titular del sector.
Perfil y retos de Manuel Balladares en Migraciones
Manuel Alberto Balladares Ramírez asume la conducción de Migraciones en medio de una coyuntura compleja. Entre sus principales desafíos se encuentran el fortalecimiento del control fronterizo, la mejora en los tiempos de atención en aeropuertos y pasos fronterizos —como lo ocurrido recientemente en Tacna—, y la necesidad de articular esfuerzos con otras entidades del Estado.
Además, deberá atender las observaciones sobre la operatividad del sistema migratorio, asegurar una mejor coordinación con la Policía Nacional y reforzar los filtros para prevenir el ingreso de personas vinculadas a actividades ilícitas.
Expectativas institucionales y reacciones
Desde el Ejecutivo se espera que la nueva gestión reactive los mecanismos de control y devuelva confianza a los sectores que han expresado su preocupación. El cambio ocurre también en un momento en que se ha intensificado la presión pública por medidas más estrictas ante el aumento de delitos cometidos por extranjeros en el país.