Guerrero: El caso del INPE debe investigarse, hay evidencia firme
Para Guerrero, la evidencia contra el jefe del INPE obliga a una respuesta inmediata del Ministerio de Justicia
En una reciente entrevista, el exprocurador anticorrupción, Alex Guerrero, analizó la denuncia contra el jefe del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Iván Paredes Yataco, quien habría solicitado una coima de 80.000 soles a cambio de facilitar la libertad de un interno. Guerrero señaló que los audios difundidos por Cuarto Poder constituyen evidencia sólida y que el caso debe pasar de inmediato a manos del Ministerio Público.
Para el abogado, los registros entregados por la denunciante “están para la fiscalía con evidencia fuerte”.
Ministerio de Justicia debe asumir responsabilidad institucional
Guerrero destacó el impacto institucional de la denuncia y consideró que el caso no puede limitarse al ámbito penal, sino que exige una respuesta política inmediata. “Esta situación tiene que ser ya tomada por el ministro de Justicia, porque el INPE pertenece directamente al sector Justicia y Derechos Humanos”, indicó.
En esa línea, subrayó que tanto el ministro como el presidente de la República tienen facultades para suspender al jefe del INPE, incluso si la investigación aún se encuentra en etapa preliminar. “No nos olvidemos que el presidente del INPE administra el personal y recursos de todos los penales a nivel nacional”, advirtió.
Paredes se niega a pasar pericia de voz
Uno de los puntos más sensibles en el análisis de Guerrero fue la negativa de Paredes a someterse a una pericia fonética, que podría confirmar si es su voz la que aparece en los audios. Explicó que el fiscal puede ordenar su conducción, incluso compulsiva, para que se someta a la prueba.
Esta actitud, según el penalista, agrava la situación procesal del funcionario, al tiempo que refuerza la necesidad de tomar medidas preventivas para proteger la credibilidad del sistema penitenciario.
Delitos involucrados y cuestionamiento político al nombramiento
Guerrero también indicó que la investigación podría derivar en imputaciones por tráfico de influencias o cohecho, aunque ello dependerá del análisis que haga el Ministerio Público sobre el contenido completo de los audios.
Finalmente, cuestionó la forma en que Iván Paredes accedió al cargo. “En vez de subir los requisitos, se bajaron. Eso es preocupante. El jefe del INPE debe ser un hombre probo, profesional, con conducta intachable”, dijo. Esta rebaja de estándares podría abrir una nueva línea de investigación sobre responsabilidades políticas.
Llamado a la ética y a la transparencia institucional
Guerrero señaló que, más allá del proceso penal, corresponde que el jefe del INPE se aparte del cargo mientras se esclarecen los hechos.
"La sola sospecha ya es incompatible con el ejercicio de un cargo de esa responsabilidad”, afirmó. Para el abogado, permitir que continúe al frente de la institución deteriora la confianza ciudadana en el sistema penitenciario y en la lucha contra la corrupción.