Miraflores: Municipalidad defiende elección de color de bolardos
La Municipalidad de Miraflores defendió la elección del color “verde turquesa menta” para los bolardos que separan las ciclovías de la calzada, señalando que no existe una normativa específica sobre el color a utilizar, sino criterios generales como la visibilidad y la integración con el entorno.
En diálogo con Canal N, Renzo Vallejo, subgerente de movilidad urbana, explicó que el color verde fue seleccionado porque ha sido tradicionalmente usado en la zona, destacando que estos bolardos son reciclados y transmiten un mensaje ecológico.
Además, mencionó que se eligió el verde por su capacidad de ser visible, especialmente de noche, gracias a los reflectores que poseen.
Desestima críticas
Se desestimaron las críticas que asociaban el color con el partido político de Rafael López Aliaga, argumentando que el verde tiene muchas tonalidades y que no tiene relación con el color celeste utilizado por dicho partido.
Vallejo también aclaró que la decisión no se basó en criterios políticos, sino en aspectos técnicos relacionados con la seguridad y la funcionalidad.
En cuanto a la comparación con colores como el amarillo, comúnmente asociado con señales de advertencia, se explicó que cada color tiene un propósito específico en la señalización y que el verde es más adecuado para este tipo de separadores viales.
La municipalidad aseguró que el diseño cumple su función de proteger a los ciclistas y que los reflectores de los bolardos son una característica clave para garantizar su visibilidad durante la noche.
Bolardos verdes violan norma de tránsito, advierte experto
Expertos en tránsito como Frankie Barreto, jefe de Investigación en Tránsito, sostienen que el uso de ese color es una transgresión a la Ley General de Transporte y Tránsito Terrestre (Ley N.º 27181).
Según esta norma y el Manual de Dispositivos de Control de Tránsito del Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC), los bolardos deben ser de color naranja —o amarillo en algunos casos— para asegurar uniformidad, visibilidad y contraste en la vía.
Advirtió que los gobiernos locales no pueden establecer colores arbitrarios y que lo hecho por Miraflores podría constituir una falta regulada por el artículo 11.2 de dicha ley.
El especialista recalcó que el color verde, sea cual sea la tonalidad, no está contemplado como válido para este tipo de señalización vial, y que su uso puede confundir a los conductores y poner en riesgo a los ciclistas.