Santibáñez regresa al gabinete como ministro de Justicia
Juan José Santibáñez Antúnez fue designado este 23 de agosto como nuevo ministro de Justicia y Derechos Humanos, en reemplazo de Enrique Alcántara. Su juramentación se realizó en Palacio de Gobierno, encabezada por la presidenta Dina Boluarte, en una ceremonia oficial que también incluyó cambios en los ministerios de Mujer y de Desarrollo e Inclusión Social.
El retorno de Santibáñez al gabinete se produce cinco meses después de ser censurado por el Congreso como ministro del Interior, y en medio de una investigación penal que mantiene vigente un impedimento de salida del país por 18 meses.
Designación en medio de investigaciones y censura previa
El nombramiento de Santibáñez ha generado amplias reacciones políticas debido a su historial reciente. El 21 de marzo, el Congreso de la República aprobó su censura por una serie de cuestionamientos durante su paso por el Ministerio del Interior. A pesar de ello, fue reincorporado al Ejecutivo desde una posición estratégica como jefe de la Oficina de Apoyo al Consejo de Ministros.
Desde ese cargo, Santibáñez mantuvo una presencia activa en Palacio de Gobierno, recibiendo a congresistas y autoridades. Su influencia política no se redujo, y su cercanía con la presidenta Dina Boluarte fue destacada por diversos analistas y medios, incluido el programa “Cuarto Poder”, que en junio ya advertía sobre la posibilidad de que se le asignara la cartera de Justicia.
El regreso al gabinete, ahora con rango de ministro de Estado, ocurre mientras Santibáñez enfrenta una investigación fiscal por presunto tráfico de influencias. El Poder Judicial rechazó recientemente un hábeas corpus presentado por su defensa en este proceso.
Críticas del Congreso por la designación
La decisión del Ejecutivo ha sido calificada como “una burla” por sectores del Congreso. El parlamentario Diego Bazán, uno de los impulsores de su censura en marzo, señaló que el retorno de Santibáñez responde a una estrategia para blindarlo políticamente.
Bazán también advirtió que el cargo de ministro de Justicia otorga poder sobre decisiones clave como la construcción de nuevos penales y la posición del Estado frente a instancias internacionales como la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Tensiones internas en el Ejecutivo y poder consolidado
Diversas fuentes políticas han descrito una disputa interna en el Ejecutivo entre el presidente del Consejo de Ministros, Eduardo Arana, y el propio Santibáñez. La designación de este último en el Ministerio de Justicia habría sido impulsada directamente desde Palacio de Gobierno, como una señal de consolidación de poder.
El saludo entre Arana y Santibáñez durante la juramentación ha sido interpretado como una muestra de unidad institucional, aunque persisten versiones sobre tensiones en torno al liderazgo dentro del gabinete.
La estructura del gabinete ha sido modificada para permitir este ingreso. Fanny Montellanos fue trasladada del Ministerio de la Mujer al Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social, y Ana Peña Cardoza asumió la cartera de Mujer.
El nombramiento de Juan José Santibáñez como ministro de Justicia marca un giro político en la composición del gabinete y abre nuevos frentes de debate institucional. Su rol será clave en un contexto de reformas judiciales, procesos internacionales pendientes y vigilancia del sistema político ante eventuales conflictos de interés.