SJL: Alcalde lamentó demora del Gobierno sobre ola delincuencial: ¿Qué hubiera pasado si esto sucedía en Miraflores?
El alcalde de SJL, Jesús Maldonado, lamentó que la presidenta Dina Boluarte demore en oficializar la declaratoria de estado de emergencia
San Juan de Lurigancho, San Martín de Porres y Sullana se encuentran en estado de emergencia debido a la ola delincuencial que ha azotado a estos distritos.
En diálogo con Canal N, el alcalde de SJL, Jesús Maldonado, lamentó que la presidenta Dina Boluarte demore en oficializar la medida.
En esa línea, cuestionó que cuál habría sido la actitud de la jefa de Estado si estos actos calificados como terrorista hubieran sucedido en Miraflores, San Isidro o La Molina.
“San Juan de Lurigancho amanece sin esta formalidad del estado de emergencia que anunció la presidenta”, dijo.
“Qué hubiera pasado si esos 81 muertos que se ha llevado la extorsión y el sicariato hubieran sucedido en otro sector de Lima. Qué hubiera pasado si esto hubiera sucedido en Miraflores. Te imaginas 81 muertos en Miraflores, La Molina y San Isidro”, apuntó.
La autoridad edil expresó su preocupación por la falta de acción concreta y la impunidad con la que operan los delincuentes. Hasta el momento, se han registrado dos atentados en tan solo unas horas, lo que ha generado temor e inseguridad en la población.
“Van 81 muertos por manos del sicariato y no tenemos detenidos. Es un acto terrorista y debería ser calificado y sancionado como tal. Ellos siguen actuando de manera impune pese a la declaratoria de emergencia”, declaró.
COMERCIO AMBULATORIO
El alcalde también destacó la necesidad de abordar el problema del comercio ambulatorio, que muchas veces está relacionado con los actos de extorsión.
Si bien se han realizado esfuerzos para disminuir la presencia de ambulantes en algunas zonas, la falta de apoyo policial ha dificultado el control de estas actividades ilegales.
“Nosotros hemos disminuido el comercio ambulatorio y formalizado en las zonas donde hemos podido actuar”, comentó.
“Hay zonas en la que nos es imposible ingresar. En la 10 de Canto Grande, hemos terminado con fiscalizadores golpeados y amenazados esta zona está tomada por la delincuencia. El problema es sostener esto en el tiempo”, precisó.