Soto plantea pena de muerte para sicarios y extorsionadores
El congresista Wilson Soto presentó un proyecto de ley que busca aplicar la pena de muerte o cadena perpetua para quienes cometan delitos de extorsión, secuestro, robo agravado o sicariato
Desde la bancada de Acción Popular se presentó un nuevo proyecto de ley que busca modificar el código penal para tipificar el delito de terrorismo y sancionar con la pena de muerte o cadena perpetua a quienes cometa actos de sicariato, secuestro, extorsión o robo agravado "y cuya consecuencia sea la muerte de la víctima".
"Sabemos que la mayoría de la población del Perú vive con zozobra. Creo que es más con el sicariato y la extorsión que, prácticamente, nos ha ganado terreno. Entonces yo creo que aquí tenemos que ser bastante duros con la delincuencia, por eso nosotros nos hemos puesto al lado de la población", argumentó el congresista Wilson Soto, gestor de la propuesta legal.
El parlamentario de Acción Popular también se refirió a la situación del Perú ante la Convención Americana sobre Derechos Humanos, conocida como el Pacto de San José, la cual busca proteger y defender los derechos de las personas, sin distinciones.
"Esperemos también que el Perú, de una vez por todas, se retire de la Corte Interamericana de Derechos Humanos porque esa corte no hace más que proteger a los delincuentes. ¿A ver qué derechos tienen los delincuentes, sicarios o extorsionadores cuando asesinan a diario a los peruanos?", cuestionó en entrevista a Canal N.
El congresista Wilson Soto señaló que, desde su bancada, van a exigir que se agilice el trámite del proyecto de ley que propone la pena de muerte contra extorsionadores o sicarios.
"Muchos países del mundo, entre ellos naciones con altos índices de seguridad pública como Estados Unidos y Japón, han incorporado la pena de muerte en sus legislaciones y la aplican en casos específicos que ameritan una respuesta firme y definitiva del Estado. Estos países han logrado mantener altos niveles de seguridad y control social, lo que refuerza la idea de que, en determinadas circunstancias, la aplicación de la pena de muerte puede ser una medida disuasoria efectiva frente a los crímenes más graves, garantizando la protección de la vida y el bienestar de sus ciudadanos", se indicó entre los motivos del proyecto de ley de Soto.