Sunedu: Está en riesgo una de las políticas más importantes de los últimos años
El titular de la Sunedu, Oswaldo Zegarra, sostuvo que los que impulsan la contrarreforma no quieren eliminar a la Sunedu como ente regulador, sino que aspiran a capturarlo
El titular de la Superintendencia Nacional de Educación Superior Universitaria (Sunedu), Oswaldo Zegarra, señaló que el dictamen que modifica el Consejo Directivo de dicha entidad, pone en riesgo la continuidad de una de las políticas más importantes de los últimos años.
Zegarra afirmó que el dictamen ha sido promovido bajo el eslogan engañoso de restablecer la autonomía universitaria, pero esconde "un propósito más oscuro y plagado de intereses", por el cual se busca retornar a la época de mayor crisis de la educación universitaria, cuando las universidades tenían licencia para actuar sin dar cuenta a nadie.
Los resultados de dicha situación de caos, recordó, fueron la proliferación de universidades que no tenían estándares de calidad, que solo aspiraban al lucro, rectores con sueldos millonarios y redes de corrupción.
"Hay un común denominador en ese orden de cosas al que se pretende regresar: un profundo desprecio por los estudiantes, justamente aquellos a los que se debe la existencia de una universidad”, aseveró tras informar que presentarán en las próximas horas una acción de amparo ante el Poder Judicial.
Para Zegarra, el concepto de autonomía al que se apela apunta al libertinaje y así quienes manejan las universidades hagan y deshagan a su antojo sin rendir cuentas a estudiantes ni comunidades ni al Estado.
Sostuvo, además, que los que impulsan la contrarreforma no quieren eliminar a la Sunedu como ente regulador, sino que aspiran a capturarlo y mantenerlo como si nada hubiera pasado. "Es como si los bancos tuvieran un asiento en la Superintendencia de Banca y Seguros", comentó.
Refirió, asimismo, que el debate público sobre el tema ha estado plagado de mentiras contra la Sunedu, las cuales rechazó al atentar contra los miembros del consejo directivo.
Zegarra formuló un nuevo llamado al Congreso, a fin de reconsiderar lo aprobado y pasarlo al archivo. También invocó al Ejecutivo a que revise con detenimiento el dictamen y, llegado al caso, lo observe.