Vecinos y transportistas preocupados por ataques de delincuentes

El asesinato de Demetrio Huamaní Ochoa, un mototaxista de 69 años, en el kilómetro 18 de la avenida Túpac Amaru, en Carabayllo, ha dejado una profunda sensación de temor y desolación entre los vecinos y trabajadores de la zona.

El crimen ocurrió a las 6:30 a.m. y, según los informes, fue perpetrado por sicarios que dispararon catorce veces contra la víctima.

Este hecho ha exacerbado las tensiones entre dos grupos delictivos que están extorsionando a las empresas de mototaxis en la zona, entre ellos "Los Injertos del Norte", una banda conocida por sus actividades criminales. 

Tras el ataque, se encontró una nota en la que un individuo, identificado como "Timothy", asumió la responsabilidad por la muerte de Huamaní.

Como consecuencia de este ataque, la empresa de transportes "Halcones", en la que trabajaba la víctima, ha suspendido sus operaciones debido al temor a represalias.

Los paraderos, que solían estar llenos de mototaxis y pasajeros, se han visto desolados, lo que refleja el impacto que la violencia está teniendo sobre los trabajadores y usuarios. 

Este incidente no es un caso aislado. La zona ha sido escenario de otros actos delictivos, lo que ha generado una creciente preocupación entre los residentes y trabajadores.

A pesar de las amenazas, algunos mototaxistas, como el que fue entrevistado por los reporteros, aseguran que no tienen más opción que seguir trabajando para sustentar a sus familias, aunque el riesgo de ser atacados sigue presente. 

Casos de asesinatos por extorsión

Además, la situación no es exclusiva de esta área, ya que el número de muertes relacionadas con extorsión y sicariato ha ido en aumento, con más de cien víctimas en los primeros 24 días del 2025.

El asesinato de Huamaní se suma a esta lista de víctimas de la violencia que afecta tanto a trabajadores informales como a la ciudadanía en general. 

La falta de seguridad en las calles y la impunidad de los grupos criminales están contribuyendo a que estos hechos sigan ocurriendo, lo que crea un sentimiento de inseguridad en la población.

La policía está investigando el crimen, y se espera que las cámaras de seguridad del área puedan proporcionar más pistas sobre los responsables de este ataque.