Brasil: Michel Temer también estaría envuelto en escándalo de sobornos
Las empresas que construyeron la central hidroeléctrica de Belo Monte pagaron sobornos millonarios al partido político del presidente de Brasil, Michel Temer, según un informe policial divulgado hoy por el diario Folha de Sao Paulo.
El consorcio de constructoras aceptó pagar sobornos equivalentes al 1 % del valor del contrato de Belo Monte, la tercera mayor hidroeléctrica del mundo, al Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), según el diario.
[LEE: Brasil: miles protestan en Sao Paulo contra el Gobierno de Temer]
El valor del contrato ascendía a 13.400 millones de reales (unos 4.187 millones de dólares), por lo que el soborno sería de 134 millones de reales (41,8 millones de dólares), supuestamente pagados a través de donaciones legales a campañas electorales del PMDB entre 2010 y 2014.
Según la Folha de Sao Paulo, la Policía basa sus sospechas en delaciones realizadas por implicados en el caso de corrupción de Petrobras que se han acogido a acuerdos de colaboración con la Justicia para reducir sus penas, entre ellos Otavio Marques de Azevedo, expresidente de la constructora Andrade Gutiérrez.
[LEE: Michel Temer viaja a China para "pasar página" tras la crisis en Brasil]
Belo Monte fue construida por un consorcio de empresas formado por Andrade Gutiérrez, Queiroz Galvao, OAS, Odebrecht, Camargo Correa, Serveng, Galvao Engenharia y J. Mallucelli.
Según el periódico, los principales beneficiarios de los sobornos fueron cuatro senadores del PMDB, entre ellos el presidente de la Cámara Alta, Renán Calheiros, además de Romero Jucá, Jader Barbalho y Valdir Raupp.
[LEE: Frente Amplio se solidariza con expresidenta Dilma Rousseff]
Romero Jucá fue nombrado por Temer ministro de Planificación cuando asumió la Presidencia interinamente el pasado 12 de mayo, pero tuvo que dimitir una semana después por la divulgación de una grabación realizada por la policía en la que sugería que el PMDB pretendía frenar las investigaciones de los casos de corrupción. EFE