Carguero espacial ruso Progress M-27M pierde el control y se precipita a tierra
Los operadores del Centro de Control de Vuelos Espaciales de Rusia lanzaron el carguero Progress M-27M pero poco después perdieron el control luego de que la nave se ubicara en una órbita errónea y dejara de enviar datos a la Tierra.
Tras varios intentos fallidos de recuperar el control del carguero, este giró a gran velocidad sobre su propio eje, y luego empezó descenso a tierra de forma rápida y descontrolada.
La Progress M-27M es una nave no tripulada, que cuenta con una masa en lanzamiento de 7 mil 290 kilogramos. En su interior llevaba cerca de 2 toneladas y media de suministros para la EEI, como combustible, oxígeno, alimentos, equipos científicos y regalos para los tripulantes.
Los cargueros rusos son naves similares a la Soyuz que empezaron a utilizarse en los años 70 como eslabones entre la Tierra y la EEI. La pérdida del Progress no supondrá un problema para los seis astronautas pues estos disponen de varios meses de reserva.
Uno de los responsables del centro de control ruso dijo a AFP que el carguero se encuentra en franca caída y es imposible saber exactamente cuándo se producirá el impacto, no obstante señaló que será incontrolable.
Por su parte la Nasa confirmó que el carguero "no transporta ningún suministro esencial para el funcionamiento de la parte estadounidense de la EEI" y que al igual que el segmento ruso funciona normalmente y con las reservas necesarias.
Además de material, el Progress también lleva una réplica de la bandera soviética que el Ejército Rojo izó en Berlín en 1945 y que iba a servir a los astronautas rusos de la ISS para conmemorar el 9 de mayo, que marca la victoria aliada contra los nazis en la II Guerra Mundial.