Carlos III y León XIV rezarán juntos en la Capilla Sixtina
Carlos III y el papa León XIV participarán en un rezo conjunto en la Capilla Sixtina, un hecho sin precedentes desde el siglo XVI.
El rey Carlos III y el papa León XIV participarán la próxima semana en un servicio religioso conjunto en la Capilla Sixtina, durante la visita de Estado que el monarca británico y la reina Camila realizarán al Vaticano los días 22 y 23 de octubre. Este hecho marca el primer rezo conjunto entre un monarca británico y un pontífice desde la Reforma del siglo XVI.
La ceremonia incluirá la presencia de clérigos y coros de la Iglesia católica romana y la Iglesia de Inglaterra, de la cual Carlos III es gobernador supremo.
Un acto sin precedentes desde la Reforma protestante
El encuentro religioso entre el rey Carlos III y el papa León XIV será el primero de su tipo desde la ruptura histórica entre la Iglesia católica y la monarquía británica durante el reinado de Enrique VIII. La ceremonia se realizará en la Capilla Sixtina, bajo el techo pintado por Miguel Ángel, y simboliza un gesto de acercamiento entre ambas confesiones.
La visita incluirá también reuniones privadas y actos ecuménicos, en un contexto de relaciones diplomáticas estables entre el Reino Unido y el Vaticano.
Primer encuentro oficial entre el rey Carlos y el papa León XIV
Será también el primer encuentro oficial entre el monarca y el papa León XIV, quien fue elegido tras el fallecimiento del papa Francisco el pasado 21 de abril. León XIV, nacido en Estados Unidos y nacionalizado peruano, fue misionero en el Perú antes de su elección al pontificado.
Este encuentro se produce tras la cancelación de una visita anterior, pospuesta debido a problemas de salud del papa Francisco, quien llegó a recibir en audiencia privada a los monarcas en abril, en el marco de su 20º aniversario de bodas.
Simbolismo y diplomacia religiosa entre iglesias
La Iglesia de Inglaterra y la Iglesia católica romana mantienen relaciones formales desde hace décadas, pero este acto conjunto representa un gesto de reconciliación simbólica sin precedentes. El evento será seguido por observadores religiosos, políticos y diplomáticos de ambas partes.
La agenda incluye una serie de servicios y reuniones bilaterales que destacan el interés común en promover el diálogo interreligioso y la cooperación en temas globales.