Mascarillas pueden reducir síntomas del COVID-19 en caso de infección, según estudio
Según investigadores, podrían ser tan eficaces como las cuarentenas estrictas
De acuerdo con las autoridades sanitarias y científicos en todo el mundo, se deben usar las mascarillas porque evitan que las personas infectadas propaguen el nuevo coronavirus (COVID-19), pero además un estudio reciente de la Universidad de California y de la Universidad Johns Hopkins sugiere que los cubrebocas también pueden reducir los síntomas del COVID-19 en caso de contagio.
La investigación observó a pacientes que se contagiaron con la mascarilla puesta. Los científicos pusieron su atención en tres tipos de evidencias: virólogica, epidemiológica y ecológica.
La primera conclusión es que cuanto más virus entra a nuestro cuerpo, más enfermos nos vamos a sentir. La razón es que el sistema inmune se ve abrumado ante una carga viral con la que no puede lidiar. Eso se traduce en síntomas más graves y mayores probabilidades de que el paciente no pueda superar la enfermedad, pero si el paciente es expuesto a una menor carga viral, tendrá síntomas más leves o incluso podría no presentar síntoma alguno.
Los investigadores también llegaron a esta conclusión observando la evolución de la pandemia en varios países y encontraron que desde que se comenzaron a usar masivamente las mascarillas el porcentaje de los asintomáticos y personas con infecciones más leves ha ido en aumento.
En Estados Unidos, por ejemplo, al inicio de la pandemia los asintomáticos rondaban el 15 %, pero desde que se recomendó el uso de las mascarillas alcanzaron el 45 %.
Otro ejemplo que grafica la incidencia de los beneficios de los cubrebocas en plena pandemia se dio en los cruceros. Lo mismo demostrarían los países ya habituados al uso de los cubrebocas, como China, Taiwán y Corea del Sur, aquellos que los implementaron por esta pandemia como República Checa o incluso las naciones donde se están registrando nuevos brotes. La tendencia es idéntica: menos pacientes graves y menos muertos.
Por ello, los autores de este estudio aseguran que el uso universal de mascarillas puede reducir el estrés del sistema sanitario tanto como las cuarentenas estrictas.
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