Quito, capital de Ecuador, iniciará el 3 de junio la desescalada de restricciones por COVID-19
En Ecuador, la ciudad de Quito recibió luz verde por parte del Gobierno para iniciar a partir del próximo miércoles, 3 de junio, la desescalada en las restricciones impuestas por el coronavirus (COVID-19), confirmó el alcalde de la capital ecuatoriana, Jorge Yunda.
A través de las redes sociales el regidor precisó que el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) nacional aceptó la solicitud de la capital ecuatoriana de pasar de luz roja a amarilla en el semáforo epidemiológico, y que tras 78 días de confinamiento la ciudadanía verá cómo concluyen algunas restricciones.
"He sido informado por el COE nacional que el próximo miércoles 3 de junio la ciudad capital cambiará en el sistema de semaforización por la crisis sanitaria al color amarillo, después de 78 días de confinamiento", manifestó en una grabación en la que aparece conduciendo un vehículo con el rostro cubierto con una mascarilla.
Yunda aseguró en un vídeo difundido en las últimas horas que era momento de "trabajar, de reactivarse y producir" y que el Municipio desarrollará una campaña agresiva de promoción sanitaria, a fin de recordar a la población la importancia del uso de la mascarilla, de mantener el distanciamiento físico prudencial y del lavado a conciencia de las manos.
"En el color amarillo ya no te cuido yo, te cuidas tú", concluyó el alcalde, quien solicitó este martes a las autoridades nacionales la flexibilización de limitaciones en la urbe principal y más poblada del país, hogar de más de 3 millones de habitantes.
De acuerdo al último reporte oficial, el Distrito Metropolitano de Quito registra 3.516 positivos por el coronavirus, y 259 fallecidos, mientras que en toda la provincia de Pichincha, de la que es capital se han confirmado 3.769 positivos.
Se espera que en los próximos días se den a conocer las nuevas medidas que regirán en la ciudad bajo el semáforo amarillo, después de que su alcalde pidiera condiciones especiales de prevención por el tamaño de la urbe y el mayor riesgo de contagio.
En base a esas peticiones, la ministra de Gobierno, María Paula Romo, dio a conocer ayer nuevos parámetros que se establecerán en el proceso de "semaforización", como se conoce en Ecuador a la desescalada paulatina en función de los riesgos, sobre las restricciones impuestas por el estado de emergencia.
El nuevo "rojo" incluirá una reducción de las horas del "toque de queda", que hasta ahora es de quince horas (entre las dos de la tarde y las cinco de la mañana) y pasará a once horas, de seis de la tarde a cinco de la mañana. Además, ampliará a dos días a la semana la circulación de vehículos particulares, mientras que los taxis se alternarán dependiendo de si la placa de la matrícula termina en número par o impar.
Las consultas médicas se reanudarán y se dará prioridad al teletrabajo, mientras que el transporte de pasajeros entre las provincias seguirá suspendido, bajo este color.
Los municipios que adopten el "amarillo", desde junio verán reducir el "toque de queda" a un horario entre las nueve de la noche y las cinco de la mañana, se liberará el servicio de taxis y se permitirá el transporte urbano de pasajeros con ciertas restricciones. También se autorizará la atención en restaurantes hasta el 30 por ciento de su aforo y se pedirá a las empresas que elaboren sus propios protocolos de seguridad sanitaria para el personal.
De momento, la mayor parte de los 221 municipios del país mantiene el "rojo" en el sistema de "semáforo" epidemiológico, aunque un 30 por ciento de la población se encuentran ya en "amarillo", según las autoridades.
Con información de EFE