EE.UU.: Uber en el ojo de las autoridades por hackeo de datos
Uber se encontraba este miércoles bajo varias investigaciones en Estados Unidos luego de que la empresa admitiera el pirateo de datos de 57 millones de usuarios en el mundo, incluidos los de 600 mil conductores.
Los fiscales de los estados de Nueva York, Eric Schneiderman, y Connecticut, George Jepsen, abrieron sendas investigaciones, según confirmaron sus oficinas a la AFP.
LEE: Uber: los datos de 57 millones de usuarios han sido pirateados
Uber reveló el martes que la información fue pirateada en octubre de 2016 y que lo había mantenido en secreto durante más de un año.
Los nombres de los usuarios así como sus correos electrónicos y números de teléfonos móviles fueron robados, explicó el en un comunicado martes el presidente ejecutivo de la empresa, Dara Khosrowshahi.
Basado en una investigación externa, Khosrowshahi afirmó sin embargo que la información sobre los trayectos realizados, los números de tarjeta de crédito y cuentas bancarias, los números de seguridad social y las fechas de nacimiento de los usuarios no fueron sustraídos.
Dos miembros del equipo de seguridad de información de Uber que "comandaron la respuesta" al incidente y no alertaron a los usuarios que sus datos habían sido violados fueron despedidos de la compañía, basada en San Francisco, según Khosrowshahi.
La oficina del fiscal del estado de Nueva York no dio detalles sobre el objetivo preciso de la investigación, pero Uber había alcanzado un acuerdo con él en enero de 2016 sobre la protección de los datos de sus clientes.
La investigación sucede a otra iniciada en 2014 sobre otro hackeo contra Uber, que había pagado una multa de 20 mil dólares por no haberlo revelado a tiempo. El objetivo de ese pirateo era obtener datos sobre los conductores de la empresa y no de los clientes.
La firma de abogados estadounidense Keller Rohrback, especializada en demandas colectivas contra piratas informáticos, anunció igualmente la apertura de su propia investigación sobre el robo de datos y llamó a los usuarios de la aplicación a contactarlos.
Según fuentes cercanas al caso, Uber habría pagado 100 mil dólares a los piratas informáticos para que no divulgaran el hackeo y destruyeran la información obtenida.
"Al decidir no revelar este pirateo masivo tratando de atenuar las consecuencias pagando a los piratas para destruir los datos, Uber jugó con los datos personales de sus usuarios y de sus conductores", afirmó Cari Campen Laufenberg, abogada de Keller Rohrback.
"Además, calló durante más de un año, privando a las víctimas de un tiempo precioso para tomar medidas a fin de atenuar (las consecuencias del) robo de sus datos privados", acusó. (AFP)