Operación militar de EE.UU. destruye lancha vinculada al narcotráfico en aguas del Caribe
Una operación militar estadounidense llevada a cabo en aguas internacionales del Caribe resultó en la destrucción de una embarcación presuntamente usada por narcotraficantes.
La acción fue ejecutada por el Departamento de Guerra tras una orden directa del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Según el gobierno norteamericano, los tres ocupantes del vehículo marítimo fallecieron en el ataque.
Las imágenes del operativo fueron difundidas en redes sociales por el exsecretario del Departamento de Defensa. Las tomas aéreas muestran la lancha en movimiento momentos antes de ser alcanzada por un proyectil y estallar en llamas.
Las autoridades estadounidenses identificaron a los tripulantes como “narcoterroristas masculinos”, aunque no se brindaron más detalles sobre su identidad o nacionalidad.
Operación en el marco de ofensiva regional
El ataque se enmarca dentro de una ofensiva más amplia iniciada por Washington desde inicios de septiembre, con operaciones similares en el Caribe y el Pacífico oriental.
Según cifras oficiales, al menos setenta personas vinculadas al narcotráfico han muerto como resultado de estas acciones. Asimismo, Estados Unidos ha destruido dieciocho embarcaciones: diecisiete lanchas y un sumergible.
Este tipo de operativos forman parte de una estrategia militar que combina inteligencia, vigilancia aérea y ejecución de ataques cinéticos, según ha comunicado el gobierno estadounidense.
Las acciones se realizan exclusivamente en aguas internacionales, bajo el argumento de combate a redes de narcotráfico trasnacional.
Señalamientos contra Nicolás Maduro
Dentro del mismo enfoque, el gobierno de Donald Trump ha formulado acusaciones contra el presidente venezolano Nicolás Maduro, a quien vincula con redes internacionales de tráfico de drogas.
Aunque no se ha establecido una conexión directa entre Maduro y la operación específica del Caribe, las autoridades norteamericanas lo mencionan como parte del contexto más amplio de lucha contra el narcotráfico en la región.
Estas acciones han sido justificadas por Washington como parte de una campaña de seguridad nacional orientada a frenar el flujo de estupefacientes hacia el territorio estadounidense.