Reclusas peruanas hacen rosarios para misa del papa Francisco

Cynthia Pérez cayó presa por narcotráfico pero ahora intenta redimirse haciendo rosarios que se venderán en la misa campal que oficiará en Lima el papa Francisco.

“Nosotros sentimos una paz muy grande entre nosotros, sentimos de que ya nuestro delito está perdonado de antemano, porque lo hacemos meditando, cada semillita que introducimos al hilo es para nosotros un perdón”, dijo Cynthia Pérez.

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Pérez es una de las 259 reclusas del penal Virgen de Fátima, una prisión femenina situada en Chorrillos, distrito costero del sur de Lima, y una de las 12 cárceles peruanas donde se fabrican de forma manual 300 mil rosarios.

“Que venga acá, que venga al penal virgen de Fátima sería una bendición”, dijo Margarita Benavente, otra reclusa de la misma prisión peruana.

El pedido de elaborar los rosarios fue hecho por el Arzobispado de Lima. Parte del dinero recaudado de su venta financiará el transporte y la alimentación de los 9000 voluntarios que cumplirán la función de guardias papales.

Otra parte del dinero será para los reclusos que han trabajado en los rosarios. El papa Francisco llegará a Perú el 18 de enero en una visita de tres días, tras haber recorrido Chile.
Visitará Puerto Maldonado, en la región amazónica peruana, y la ciudad de Trujillo, en la costa norte, y oficiará una misa campal el domingo 21 en la base aérea Las Palmas, no muy lejos del penal Virgen de Fátima. (AFP)