Nuevo ataque de EE.UU. a presunta narcolancha en el Caribe
Estados Unidos confirmó otro ataque en aguas internacionales contra una presunta lancha con drogas. La acción se suma a una ofensiva militar con más de 70 muertos desde septiembre.
Estados Unidos confirmó un nuevo ataque en el Caribe contra una presunta lancha que transportaba estupefacientes, dejando tres personas muertas. La acción fue ejecutada por orden del presidente Donald Trump como parte de la campaña antidrogas iniciada en septiembre, según informó el Departamento de Defensa.
El hecho ocurrió en aguas internacionales, de acuerdo con la información oficial difundida por el secretario del Departamento de Guerra, Pete Hegseth. En la red social X, el funcionario publicó imágenes aéreas que muestran a la lancha navegando antes de explotar.
Nuevo operativo militar en aguas internacionales
El Pentágono informó que la operación tuvo como blanco una embarcación que, según sus informes, estaba operada por una organización terrorista designada. La acción se definió como un “ataque cinético letal” y fue ejecutada con autorización directa del Ejecutivo estadounidense.
El ataque de EE.UU. en el Caribe dejó tres fallecidos, identificados como “narcoterroristas masculinos”, según la versión oficial. No se brindaron detalles adicionales sobre su nacionalidad o afiliación específica.
Este operativo se suma a una serie de acciones similares desplegadas en el Caribe y en el Pacífico oriental, áreas donde Washington ha intensificado sus operaciones militares desde el inicio de septiembre.
Saldo total de muertos supera los 70
Con esta intervención, el número total de personas muertas en la ofensiva antidrogas impulsada por Estados Unidos asciende a por lo menos 70. Hasta el momento, el gobierno norteamericano ha informado la destrucción de 18 embarcaciones, de las cuales 17 eran lanchas rápidas y una un semisumergible.
Las operaciones han sido justificadas como medidas preventivas contra amenazas que, según las autoridades estadounidenses, “ponen en riesgo a la patria” desde redes criminales transnacionales. No se ha informado sobre detenciones o recuperación de cargamentos en este último ataque.
El video difundido muestra el momento exacto en que la embarcación explotó tras ser alcanzada por el armamento estadounidense.
Campaña militar incluye despliegues en el Caribe
Además de los ataques específicos, la campaña antidrogas de Estados Unidos ha incluido la movilización de seis buques de guerra en la región caribeña. También se han desplegado aviones F-35 en Puerto Rico y el grupo de ataque del portaviones USS Gerald R. Ford ha sido redirigido hacia el Caribe.
Desde octubre, se han registrado al menos cuatro sobrevuelo militares frente a las costas de Venezuela. Estas maniobras han sido calificadas como demostraciones de fuerza y parte de una estrategia regional de presión.
Washington sostiene que las acciones forman parte de un esfuerzo para erradicar el tráfico de drogas en el continente y combatir a los grupos armados que lo facilitan.
Señalamientos contra el gobierno de Venezuela
La ofensiva antidrogas promovida por el presidente Trump ha incluido acusaciones formales contra el presidente venezolano Nicolás Maduro. Washington lo ha vinculado con redes de narcotráfico internacional y lo ha incluido en sus investigaciones como parte de la operación regional.
Desde Caracas, Maduro ha negado las acusaciones y ha calificado las maniobras estadounidenses como intentos de desestabilización. El mandatario ha afirmado que en su país no existen cultivos ilegales y ha rechazado la presencia militar extranjera en la zona.
Las tensiones entre ambos gobiernos se han mantenido desde el inicio del operativo militar estadounidense en septiembre.
Debates sobre legalidad de las operaciones
Diversos expertos en derecho internacional y organismos multilaterales han cuestionado la legalidad de los ataques. Desde Naciones Unidas, el jefe de Derechos Humanos, Volker Turk, expresó preocupación por las muertes reportadas, indicando que muchas “no encuentran justificación en el derecho internacional”.
Además, algunas familias de víctimas y gobiernos han denunciado que entre los fallecidos habría civiles, incluidos pescadores que operaban en zonas costeras o aguas internacionales sin vínculos confirmados con el narcotráfico.
Hasta ahora, el Departamento de Defensa no ha mostrado pruebas públicas sobre la identidad o actividades de los ocupantes de las embarcaciones destruidas.
Declaraciones del Pentágono sobre los operativos
El secretario de Defensa de EE.UU. reiteró en redes sociales que el objetivo de los operativos es disuadir el tráfico de drogas. En una de sus publicaciones declaró: “A todos los narcoterroristas que amenazan nuestra patria: si quieren seguir vivos, dejen de traficar drogas”.
Las acciones han sido descritas por el Ejecutivo como parte de un “conflicto armado” con cárteles latinoamericanos. Esta calificación ha sido utilizada para justificar las operaciones militares en alta mar.
Hasta la fecha, no se ha anunciado el cierre de la campaña ni modificaciones en las reglas de intervención. La estrategia de ataque de EE.UU. en el Caribe permanece activa.
Estados Unidos ejecutó un nuevo ataque en el Caribe contra una presunta lancha con drogas, dejando tres muertos. La operación fue ordenada por el presidente Donald Trump y definida como “cinética letal”. El total de víctimas mortales en la actual campaña antidrogas supera las 70. Washington ha destruido 18 naves y desplegado fuerzas militares en la región. La ONU y organizaciones de derechos humanos han cuestionado la legalidad de los operativos. El gobierno estadounidense califica a los cárteles como grupos terroristas y afirma estar en “conflicto armado”. No se ha confirmado la identidad de los fallecidos en este último caso.