Zunduri, la esclava mexicana que estuvo dos años encadenada en una lavandería
Una joven que había permanecido dos años en el interior de un negocio en México D.F denunció que sus presuntos captores la obligaban a trabajar torturándola. Ahora que está libre, solo desea que la llamen 'Zunduri'.
“Es japonés. Así se llamaba una amiga. Significa ‘niña hermosa’”, declaró para el medio Hora Cero.
Tienen 22 años, pero los médicos aseguran que sus órganos corresponden a una mujer de 81. Sus captores la obligaban a realizar trabajos forzados en la lavandería, como planchar encadenada del cuello día y noche.
La chica sufrió golpes, quemaduras con la plancha. Subsistía con poca comida y frecuentemente sin poder dormir, informó la BBC.
En un reportaje hecho por Univisión Noticias, la víctima relata que fue a pedir trabajo a la lavandería y que las personas que la contrataron, después de un tiempo, la encadenaron para que no dejara de laborar porque, si lo hacía, la comenzaban a golpear hasta que sangrara.
ESCAPÓ
Nadie nunca vio a Zunduri, nadie nunca la escuchó pedir por ayuda. Estaba oculta detrás de pilas de ropa y las pocas veces que se aventuró a gritar, la única respuesta que recibió fueron golpes.
La justicia mexicana asegura que los presuntos responsables fueron los miembros de la familia que la mantuvo cautiva, aunque el maltrato más grave provino de la dueña del negocio, identificada por las autoridades como Leticia Molina Ochoa.
La semana pasada aprovechó un descuido de quienes la esclavizaban y escapó. Una amiga le ayudó a denunciar el caso en la Procuraduría (fiscalía) General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF).
Los captores de la joven están detenidos acusados de trata de personas por trabajo forzado.