Conductores rechazan que paro tenga intereses políticos

El presidente de la Asociación Nacional de Conductores, Miguel Ángel Palomino, se manifiesta en contra de la violencia y extorsiones que sufren los conductores, argumentando que el sector está siendo gravemente afectado por la inseguridad.  

En diálogo con Canal N, remarcó que los conductores son los más perjudicados por la delincuencia y los actos de extorsión, y acusa al gobierno y al Congreso de no responder adecuadamente a estas amenazas.

En diálogo con Canal N, remarcó que los conductores son los más perjudicados por la delincuencia y los actos de extorsión, y acusa al gobierno y al Congreso de no responder adecuadamente a estas amenazas.

También critica a los representantes del sector formal del transporte, quienes dicen que no pararán, argumentando que estos no representan a los verdaderos afectados. 

Insiste en la derogatoria de la ley de crimen organizado

Uno de los puntos centrales de su discurso es su rechazo a la Ley 32108 que considera una herramienta que favorece la impunidad y protege a las bandas criminales.  

Esta ley, que ha sido modificada para facilitar los allanamientos y otras acciones en casos de crimen organizado, es vista por los conductores como una medida insuficiente.

Exigen su derogación total, así como el archivo de otros proyectos de ley que consideran perjudiciales, como el proyecto de ley de "terrorismo urbano". 

Además, acusa a los congresistas de haber aprobado leyes que solo buscan protegerse a sí mismos y no velar por los intereses del país. 

"Nos vamos a un tecer paro por culpa del Congreso. Vamos a pedir la derogatoria de todas las leyes que han sido fabricadas con el fin de blindarse y protegerse", expresó.

Hace un llamado a la derogación de estas leyes y propone que, si el Congreso y el gobierno de Dina Boluarte siguen ignorando sus demandas, se considere la posibilidad de convocar a elecciones anticipadas.

Rechazan que paro tenga intereses políticos

También rechaza las acusaciones de que el paro tiene un fondo político o busca desestabilizar el gobierno, afirmando que sus preocupaciones son genuinas y responden a la necesidad de defender a los conductores.

Pide que la marcha y el paro de mañana se desarrollen de manera pacífica, e incluso menciona que los mismos conductores organizarán cuadrillas para proteger a los trabajadores y a la ciudadanía.