Este fin de semana muchos jóvenes acudieron a diversos centros nocturnos para celebrar el Día de la Canción Criolla y Halloween en diferentes distritos de Lima. Muchos de estos locales no contaban con autorización y no cumplían con las medidas de prevención contra el COVID-19.
En una discoteca de Villa María del Triunfo, la Policía tuvo que ingresar por la parte alta de una cochera para poder intervenir el abarrotado local donde cientos de jóvenes festejaban. La fiesta fue cancelada porque no contaba con los permisos pertinentes.
En Comas ocurrió una situación similar, además de fiestas sin autorización, vecinos denunciaron que se realizaban conciertos en plena vía pública a pesar del toque de queda.
En el Callao, los asistentes a una discoteca intentaron huir de una intervención policial por la única puerta de salida del local, exponiendo sus vidas. Como lo anunció el Ministerio del Interior, las fiestas y reuniones sociales, incluso las realizadas dentro de casa, están prohibidas por razones sanitarias.