Así se vivió el popular Mundialito de El Porvenir en La Victoria

Es la fiesta popular más grande del fulbito y otra vez lo dejó en claro. Como cada primero de mayo el mundialito de El Porvenir convirtió la congestionada avenida Parinacochas en el escenario del campeonato de fulbito más vibrante y emotivo, esta vez en su edición 67.  

Lo singular del Mundialito de El Porvenir es que no hace falta anotar goles para llevarse la victoria. Se puede alcanzar la gloria solo por faltas o tiros de esquina, si es que los partidos terminan igualados.  Así fue como Purito Barrios Altos se consagró como campeón tras igualar 1 a 1 con el equipo Confecciones Yorely. La final se definió por un córner.

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Los partidos estuvieron cargados de emoción, goles, estremecedoras faltas y vibrantes momentos. Los jugadores estaban dispuestos a pelear cada pelota como si fuera la última. Cada balón se disputaba con todo y muchas veces las entradas terminaron en impresionantes faltas.

Pero la fiesta no solo se vivió en la cancha de cemento y en las improvisadas tribunas. En los alrededores también se jugaba el mundialito de la gastronomía. Comerciantes aprovecharon la oportunidad para ofrecer sus mejores platillos.

Una variedad de comidas que no tenían nada que envidiarles a conocidas ferias gastronómicas. Pollos a la brasa, tacos, ceviche, seco de cabrito, el popular ‘siete colores’ y muchos otros potajes que deleitaron el paladar de los más exigentes comensales.

El mundialito de El Porvenir terminó luego de varias horas de partidos más luchados que jugados. Y aunque se acabó la jornada deportiva, la celebración no se detuvo. Aprovechando el feriado muchas personas siguieron degustando la comida, tomando cerveza y escuchando la orquesta de salsa que acompañaba el evento.