Patricia Benavides: ¿Quiénes alertaron a la exfiscal de la Nación de la operación Valkiria V?

Jaime Villanueva, exasesor y hoy colaborador ha dicho que la exfiscal de la Nación, Patricia Benavides, le dio indicaciones claras y directas, horas previas al allanamiento.

Benavides, quien habría usado un número de celular paralelo con el apelativo de “Vane”, le envió un mensaje a su entonces asesor, a través del aplicativo Signal. Por escrito dejó huella de su solicitud: comunicarse de manera urgente con ella.

El mensaje era que el Equipo Especial de Fiscales Contra la Corrupción del Poder (EFICCOP) y el equipo especial de la policía ejecutarían un operativo donde él sería el objetivo. Por lo que le ordenó que se interne en la clínica San Pablo ubicada en la avenida El Polo en Santiago de Surco.  Indicación que él acató a pie juntillas.

En segundo término, la exfiscal de Nación le dijo a Villanueva que “ya sabía lo que tenía que hacer”, en el sentido de que tenía que desaparecer su teléfono celular, documentación y cualquier otra cosa que pueda involucrarlos ilícitamente.

Y, finalmente, Benavides le pidió que se mantenga en contacto con Miguel Angel Girao, también su exasesor, mientras ella acudía a su despacho en la Fiscalía de la Nación.

Paralelamente, a través de otros empleados, se buscaba conocer detalles del operativo, que estaba por suceder. Es así que, a las 9 de la noche del 26 de noviembre, Claudia Ruiz Mesías, fiscal provincial del área de enriquecimiento ilícito, a través de su esposo, también fiscal, se comunicó con un colega miembro del EFICCOP, con Luis Vicente Silva Loli.

“¿Oye, sabes si EFICCOP va a golpear, le van a caer a un asesor de la Fiscal de la Nación? ¿No hay ningún caso de asesores por ahí?”, se indicó en el documento de la investigación fiscal.

Silva Loli habría sido designado en el Equipo Especial de Marita Barreto con un propósito en particular. Mantener a los allegados de la Fiscal de la Nación informados de lo que ocurría en esa oficina.

Sería sus ojos y oídos y, además, el hombre que daría sustento a la remoción de Marita Barreto de su cargo. Aquella noche, Silva Loli reportó que el fiscal Freddy Niño y su adjunto Julio Ormeño venían realizando diligencias fuera de la oficina. La alerta había sido enviada con dicha frase. 

“¿Estás seguro? ¿puedes confirmar? ¿no has notado nada en estos días?”, es lo que informó Luis Vicente Silva Loli.

La exfiscal de la Nación y su equipo estaban contra el reloj, según lo narrado por el colaborador, quien, además, se comunicó con Miguel Angel Girao, quien también le indicó desaparecer su teléfono y cualquier documentación.

Todo había sido calculado. Villanueva debía alertar, a través de su familia, el momento exacto del inicio del operativo. Sus parientes debían llamar a Girao, como si éste fuera su abogado, de esa manera la exfiscal de la Nación y su equipo sabrían que el operativo ya estaba en marcha

Villanueva recibió indicaciones, pero no las acató a plenitud. No borró evidencias, las ocultó. Sacó el chip de su celular y lo ingresó en otro teléfono con el que fue encontrado en la Clínica San Pablo.