El Perú vivió 12 años de terror por atentados de Sendero Luminoso

Hasta 1990, Sendero Luminoso había cometido cerca de 17 mil acciones terroristas. 16 mil personas murieron a causa de ellas. Su objetivo era la conquista del poder. Su marcha era 'Del campo a la ciudad'.

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Sendero centró sus ataques terroristas en Ayacucho. El primero de ellos el 17 de mayo de 1980, un día antes de las elecciones presidenciales. Quemó papeletas electorales en Chuschi, pero este fue solo el inicio de una serie de atentados.

A estos terroristas se les imputa la masacre de Lucanamarca, en Ayacucho, Yainapango y Mapotoa, comunidades ashaninkas de la selva, así como el asesinato de la dirigente vecinal María Elena Moyano.

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Las empresas comerciales tampoco se salvaron de los atentados terroristas. Estos eran ejecutados por venganza, en algunos casos por no pagar los cupos exigidos. Entre ellos figura el atentado a Hiraoka, frente al Ministerio Público, el cual dejó varios heridos y millones de soles de pérdidas.

Otro local atacado fue el de la Sunat, ubicado en la avenida Garcilaso de la Vega. La onda expansiva afectó a un vehículo de transporte público dejando herida a varias personas. Otro de sus objetivos fueron las torres de alta tensión para dejar sin energía electica a varias ciudades.

El aeropuerto Jorge Chávez no se salvó de la barbarie terrorista. Un coche bomba en el estacionamiento era el fiel reflejo que Sendero Luminoso no tenía límites. El coche bomba que explotó en el jirón Tarata, en Miraflores, las muertes selectivas y otros atentados más marcaron el camino de la violencia de estos terroristas que no es fácil de olvidar.