"Tuto" Quiroga entre los favoritos para presidente en Bolivia
A sus 65 años, Jorge “Tuto” Quiroga vuelve a posicionarse en el centro de la escena política boliviana como candidato presidencial. Más de dos décadas después de haber ocupado el Palacio Quemado, el exmandatario lidera encuestas y disputa voto a voto la preferencia electoral frente a Samuel Doria Medina, en una elección clave para definir el futuro del país andino.
Trayectoria política de Tuto Quiroga
Quiroga es ingeniero industrial y fue vicepresidente de Hugo Banzer. Asumió la presidencia de Bolivia en 2001 tras la renuncia de su mentor.
Gobernó hasta 2002, y durante ese breve periodo impulsó el proyecto de exportación de gas a Estados Unidos, antecedente de la llamada “guerra del gas”, uno de los conflictos sociales más recordados del país.
También promovió políticas liberal-conservadoras con apoyo de organismos multilaterales, consolidando un perfil técnico que lo diferenció del Movimiento al Socialismo (MAS), fuerza política que dominaría la política boliviana en las siguientes décadas.
Regreso a la política nacional
Después de dejar el poder, Quiroga mantuvo un rol activo en la esfera internacional como miembro del Club de Madrid. Participó en observaciones electorales y denunció violaciones a los derechos humanos en gobiernos de Venezuela, Cuba y Nicaragua. Ahora, tras tres intentos fallidos, ha vuelto a postular a la presidencia boliviana liderando la alianza Libre.
Durante un acto de campaña, reafirmó su compromiso democrático: “Elecciones libres, justas y transparentes sin fraude, como queremos tenerlas ahora… respeto irrestricto a la libre expresión y alternatividad en el ejercicio del poder”.
Alianza Libre y estrategia electoral
La nueva plataforma de Quiroga, denominada Libre, agrupa partidos de centroderecha y apuesta por un discurso reformista, con fuerte énfasis en el voto urbano y el respaldo de sectores empresariales. Su campaña se centra en Santa Cruz y regiones opositoras al MAS, donde encuentra mayor respaldo.
Frente a un electorado polarizado y disperso, Quiroga promete un recorte drástico del gasto público y el fortalecimiento de las instituciones.
En un mensaje directo a sus contendores, declaró: “Créanme, va a haber un cambio radical. Y esos bocones que son unos cobardes, vamos a ver si ellos aguantan aquí. Tú me conoces, Evo, yo aguanto todo. Tú eres un cobarde, tú no aguantas nada."
Propuestas de gobierno
Entre sus principales propuestas destaca la implementación de una carrera pública por mérito, el establecimiento de una comisión investigadora del Congreso para revisar los últimos 20 años de gestión pública y la reactivación económica con apertura comercial.
Quiroga ha reiterado su intención de reducir el tamaño del Estado utilizando “motosierra, machete, tijera y todo lo que encuentres” para ejecutar un recorte drástico del gasto en bienes y servicios.
Asegura que el Estado boliviano ha multiplicado por once su presupuesto en los últimos 20 años sin lograr eficiencia ni equidad en el gasto. Su propuesta se enmarca en la idea de reactivar la producción interna, fomentar la digitalización y mejorar la fiscalización pública.
Su visión sobre el sistema judicial
Quiroga propone una reforma integral del sistema judicial para garantizar su independencia. Considera que la justicia boliviana ha sido utilizada como herramienta política por gobiernos anteriores y propone una reestructuración institucional que asegure imparcialidad y eficiencia en la administración de justicia.
Según su propuesta, una de las primeras medidas sería establecer un nuevo sistema de selección de jueces basado en méritos y concursos públicos.
Críticas a gobiernos autoritarios
Quiroga ha sido un crítico constante de las relaciones diplomáticas de Bolivia con gobiernos como los de Venezuela, Nicaragua y Cuba. Desde foros internacionales ha denunciado la falta de democracia en esos países, alineándose con otros líderes liberales de la región.
Estas posturas lo han llevado a distanciarse del MAS y de su líder histórico, Evo Morales, con quien mantiene un enfrentamiento político directo. También ha cuestionado el papel del Estado en la economía y ha impulsado una visión de integración internacional alejada del bloque bolivariano.
Expectativas frente al electorado
Las encuestas revelan que Quiroga mantiene una posición fuerte en Santa Cruz y otras regiones con vocación opositora, pero también enfrenta el desafío de captar el voto rural y popular que tradicionalmente ha respaldado al MAS. Su equipo reconoce que será clave atraer a sectores indecisos o desencantados con las opciones tradicionales.
Aunque no se ha pronunciado sobre posibles alianzas, su entorno político admite que una eventual segunda vuelta obligaría a buscar pactos con otros candidatos de la oposición.
Jorge “Tuto” Quiroga reaparece en la política boliviana como candidato presidencial, tras más de 20 años de ausencia. Lidera encuestas junto a Samuel Doria Medina y propone reformas institucionales, reducción del gasto estatal y lucha contra la corrupción. Su campaña se centra en Santa Cruz y sectores urbanos. Con un discurso crítico al MAS y propuestas liberales, busca consolidar una alternativa para las elecciones de 2025.