Descubren fósil que revela el origen del Tiranosaurio rex
Khankhuuluu mongoliensis, una nueva especie identificada tras décadas de olvido, reescribe el árbol genealógico del depredador más temido de la prehistoria.

En el museo de Historia Natural de Mongolia, un conjunto de huesos permaneció olvidado por más de medio siglo. Hoy, ese fósil mal catalogado ha resultado ser uno de los descubrimientos más importantes de la paleontología reciente. Se trata del Khankhuuluu mongoliensis, o “Príncipe Dragón”, el nuevo antecesor directo del Tiranosaurio rex.
Este dinosaurio vivió hace unos 86 millones de años. Según los investigadores de la Universidad de Calgary, su estructura ósea sugiere una criatura más pequeña, ágil y con un hocico más delgado, muy distinta al colosal depredador que dominaría el planeta millones de años después.

¿Por qué este hallazgo es tan importante?
El análisis del fósil reveló rasgos compartidos con otros tiranosáuridos conocidos, como el Tarbosaurus y el Alioramus, lo que ha permitido completar un eslabón perdido en la evolución del Tyrannosaurus rex.
El hallazgo también refuerza la teoría de que el linaje de este temido depredador no se originó en América, sino en Asia.
El descubrimiento sugiere una migración milenaria: los primeros tiranosáuridos surgieron en Asia, migraron al continente americano, y tiempo después regresaron para diversificarse en nuevas especies.
El “Príncipe Dragón”, clave para entender la evolución
Lo más sorprendente del hallazgo es cómo un fósil olvidado pudo ofrecer una pieza tan crucial en el rompecabezas evolutivo. El “Príncipe Dragón” no solo completa el linaje del T. rex, sino que cambia la narrativa sobre sus orígenes y sus adaptaciones morfológicas.
Su historia es también una advertencia sobre cuánto conocimiento permanece aún sin descubrir en colecciones mal registradas. Como afirman los científicos, a veces los secretos de los gigantes están guardados entre huesos pequeños y nombres olvidados.





