Lula sobre Bolsonaro: "Debe ser castigado si es culpable"

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha exigido justicia en el proceso judicial que enfrenta su antecesor, Jair Bolsonaro, por su supuesta participación en un intento de golpe de Estado tras las elecciones de 2022.

En una rueda de prensa realizada en Tokio, durante su visita oficial a Japón, Lula expresó su confianza en que la justicia brasileña actuará con imparcialidad y que, si Bolsonaro es hallado culpable, será castigado adecuadamente.

"Solo espero que se haga justicia. Si él es declarado inocente en el proceso, que lo declaren inocente. Si es culpable, que sea castigado", afirmó Lula ante los medios internacionales. Las declaraciones del presidente brasileño tienen lugar en un contexto de creciente tensión política, en medio del juicio que podría definir el futuro político de Bolsonaro.

Lula ha sido enfático al señalar que existen pruebas claras que vinculan a Bolsonaro con un intento de golpe de Estado en Brasil. Según el mandatario, el exjefe de Estado no solo conspiró para impedir su asunción al poder, sino que también participó en planes para atentar contra su vida y la del vicepresidente.

"Es evidente que el expresidente intentó dar un golpe de Estado en el país. Todas las pruebas demuestran que intentó contribuir con mi asesinato, con el asesinato del vicepresidente", expresó Lula en una de sus intervenciones más contundentes sobre el tema.

La Corte Suprema de Brasil, el máximo tribunal del país, aceptó la solicitud de la Fiscalía General y determinó que Bolsonaro será juzgado por los cargos de intento de golpe de Estado.

El tribunal dictaminó, de manera unánime, que el expresidente encabezó una organización criminal con el objetivo de evitar la posesión de Lula en el cargo, tras su victoria electoral en 2022. La noticia fue recibida con repercusiones a nivel nacional, tanto en el ámbito político como en la opinión pública.

La acusación que recae sobre Bolsonaro es grave y está vinculada a los hechos ocurridos después de las elecciones de 2022, cuando grupos de extrema derecha, cercanos al expresidente, intentaron deslegitimar los resultados y generar una crisis política en el país. A pesar de las alegaciones en su contra, Bolsonaro ha insistido en que está siendo víctima de una persecución política y ha descalificado las acusaciones.