Gobernador del Cusco denunció a clínicas privadas de lucrar con la emergencia

Este martes 30 de diciembre, un choque frontal entre trenes de las empresas Inca Rail y PeruRail dejó como saldo un fallecido y más de 30 personas heridas, entre ellas ciudadanos peruanos y extranjeros. El accidente se registró alrededor de la 1:20 p. m., a la altura del kilómetro 98 de la ruta Machu Picchu – Ollantaytambo, en la zona de Pampaccahua, un tramo de acceso exclusivamente ferroviario.

La Policía Nacional confirmó que la víctima mortal fue identificada como Roberto Cárdenas, maquinista de una de las unidades siniestradas. La empresa Ferrocarril Trasandino, concesionaria de la vía férrea del suroriente peruano, confirmó que los trenes involucrados pertenecían a PeruRail e Inca Rail.

Gobernador cuestiona traslado y atención de heridos

Desde el lugar de los hechos, el gobernador regional del Cusco, Werner Salcedo, denunció públicamente que la atención médica tras el accidente estuvo marcada por descoordinaciones y una aparente priorización de intereses comerciales por parte de algunas clínicas privadas. Indicó que recibió reportes desde el sector Salud que advierten que los heridos habrían sido trasladados según conveniencias empresariales, sin respetar protocolos unificados.

Salcedo responsabilizó a las clínicas si alguno de los pacientes presenta complicaciones posteriores. “Lo ocurrido hoy no puede volver a repetirse”, expresó, lamentando que en medio del dolor se haya privilegiado el lucro sobre la vida.

Solicita intervención de ministerios y Defensoría

El gobernador informó que ha comunicado lo sucedido a la Defensoría del Pueblo y anunció que exigirá explicaciones a los ministerios competentes, en especial al Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC). Además, criticó que se haya informado primero a empresas privadas antes que a las autoridades regionales.