Pataz: Ataque a mina Poderosa deja un muerto y 50 heridos
También se reportó destrucción de una torre de alta tensión.

En la madrugada de este 28 de febrero, un ataque armado perpetrado por mineros ilegales dejó un saldo trágico en las instalaciones de la minera Poderosa, ubicada en el distrito de Pataz, en la región La Libertad.
La agresión, que también implicó la destrucción de una torre de alta tensión, provocó la muerte de un minero que trabajaba en la compañía y la afectación de al menos 50 personas por inhalación de gases tóxicos.
Estos gases fueron liberados a raíz de la quema de llantas, un modus operandi utilizado por los mineros informales para tomar control de las galerías.
Según el reporte oficial de la minera Poderosa, los atacantes lograron derribar la torre de alta tensión N° 33, que alimentaba las instalaciones de la mina. Esto dejó a la mina sin energía, lo que facilitó una serie de incursiones armadas que buscaban apoderarse de las instalaciones.
La empresa detalló que el minero fallecido estaba bajo contrato con la compañía y se encontraba en el lugar durante el ataque.
Este es el tercer ataque armado contra la minera en menos de tres meses, lo que refleja la creciente violencia y la impunidad con la que operan los mineros ilegales en la zona.
En total, la minera ha perdido 17 torres de alta tensión en los últimos tres años, lo que ha afectado gravemente la operatividad de la empresa. Además, la minera señala que más de 25 zonas están bajo control de los mineros informales, quienes actúan sin temor a la autoridad.
Poderosa también denunció la inacción de la Policía Nacional del Perú, que aún no ha respondido a sus solicitudes para desalojar a los mineros ilegales de las galerías.
La empresa ha lamentado la suspensión de operativos de interdicción en la zona y señaló que el transporte de mineral ilegal sigue siendo un problema sin resolver, con miles de volquetes trasladando mineral de forma clandestina a las plantas formales.
La minera hizo un llamado urgente al Estado para que tome medidas efectivas para garantizar la seguridad en la zona y evitar que Pataz se convierta en una "zona liberada" donde los mineros ilegales operan con total impunidad.