'Baguazo': se cumplen 10 años del enfrentamiento entre nativos y policías
33 personas fallecieron, un centenar resultaron heridas y ningún responsable político fue procesado por este hecho
Este miércoles 5 de junio se cumplen 10 años del Baguazo, violento enfrentamiento entre las fuerzas del orden y los nativos de la zona que dejó a 33 personas fallecidas durante el segundo gobierno del expresidente Alan García.
Fueron 23 policías y 10 nativos las víctimas de este enfrentamiento que se originó por la disputa de tierras y reivindicación de territorios.
Era presidente García y Mercedes Aráoz su ministra de Comercio Exterior cuando se promulgaron decretos legislativos que daban al Ejecutivo la facultad de entregar terrenos para la exploración y explotación minera, agrícola y de otras actividades a empresas trasnacionales.
Todo esto como parte del Tratado de Libre Comercio firmado previamente con el Gobierno de los Estados Unidos.
En 2007, el entonces mandatario escribió un artículo que tituló: "El síndrome del perro del hortelano". Los indígenas lo tomaron como una grave ofensa. Las comunidades se opusieron a los decretos y al inicio de operaciones de la minera Afrodita en zona protegida.
Luego de infructuosas negociaciones con el Gobierno bloquearon la carretera Fernando Belaunde Terry. Para el 5 de junio la vía llevaba cerrada 55 días.
Mercedes Cabanillas, ministra del Interior y Yehude Simon, primer ministro, dieron la orden de enviar un contingente de policías para desalojar a los miles de nativos que estaban en la zona denominada 'La curva del diablo'.
Nadie calculó tan fatídico escenario. Ni los agentes de la Diroes, superados en número, ni los nativos, sin armas de fuego y tampoco el Ejecutivo que permitió que un conflicto social acabara en masacre.
Los indígenas usaron lanzas y cuchillos contra los policías. Cientos de personas resultaron heridas. Del mayor Felipe Bazán solo quedó una fotografía, su cuerpo nunca fue encontrado.
Cuatro procesos se abrieron por estos hechos. En 2016, 53 nativos con investigación por estos hechos fueron absueltos por falta de pruebas.
Los casos pendientes son el de la toma de la estación 6 de Petroperú, el presunto homicidio de cuatro indígenas a manos de tres policías y la desaparición del mayor Bazán. Los responsables políticos nunca fueron procesados.
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