Carlos Pareja: El nombramiento de Adrianzén no incumple la norma
El exembajador dijo que la cercanía de Adrianzén con Boluarte habría sido determinante. Sin embargo, señaló que estos cargos suelen estar reservados a diplomáticos de carrera
El gobierno de Dina Boluarte ha designado a Gustavo Adrianzén como nuevo representante permanente del Perú ante la ONU, una decisión que ha reabierto el debate sobre el uso político de cargos diplomáticos de alto nivel.
La designación ha sido defendida por el canciller Elmer Schialer, quien aseguró que Adrianzén “tiene las credenciales necesarias”.
En diálogo con Canal N, el exembajador Carlos Pareja, con más de 40 años de experiencia diplomática, explicó que hasta el 20% de los embajadores pueden no ser de carrera, según el reglamento de la Cancillería.
En esa línea, detalló que el nombramiento de Adrianzén no vulnera ninguna norma interna ni internacional, ya que no existen requisitos específicos para representar a un país ante Naciones Unidas.
Sin embargo, señaló que estos cargos suelen estar reservados a diplomáticos de carrera, por la complejidad de las relaciones multilaterales y la carga de trabajo en la ONU.
El embajador saliente, Enrique Román Morey, sí era funcionario de carrera y tenía una amplia trayectoria en organismos internacionales. Esto ha generado mayor suspicacia sobre la designación de Adrianzén.
Experiencia política, no diplomática
Aunque sin formación diplomática, Adrianzén fue embajador ante la OEA, ministro de Justicia y presidente del Consejo de Ministros. Su cercanía con Boluarte habría sido determinante.
Carlos Pareja recordó que, durante su gestión ministerial, Adrianzén tuvo contacto frecuente con la Cancillería y participó en eventos internacionales, incluyendo negociaciones con la OCDE.
Pareja añadió que, en su nuevo cargo, Adrianzén contará con un equipo de diplomáticos de alto nivel que lo asesorará en todos los comités de la ONU.
Beneficios del cargo y comparación con viaje al Vaticano
Ser embajador ante la ONU implica una remuneración ajustada al alto costo de vida de Nueva York, residencia oficial, personal de servicio y presupuesto propio para la misión. En muchos casos, los sueldos superan a los que se perciben en altos cargos nacionales.
Consultado sobre el reciente encuentro informal entre Boluarte y el vicepresidente de EE. UU. James David (JD) Vance en el Vaticano, Pareja consideró que fue “un gesto simbólico” sin implicancia formal.
Finalmente, Pareja recalcó que una visita oficial a Washington requiere meses de preparación y acuerdos de agenda
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