Paola Bustamante responsabiliza al ministro y la presidenta
La exministra de Desarrollo e Inclusión Social señala que en los últimos años ha habido una alta rotación de directores ejecutivos en el programa de alimentación escolar, lo que ha generado inestabilidad y falta de comprensión en la gestión
Paola Bustamante, exministra de Desarrollo e Inclusión Social, abordó la crisis de corrupción en el programa de alimentación escolar Qali Warma.
En diálogo con Canal N, la extitular del Midis señaló que existe una gestión inadecuada y los graves problemas que han surgido en relación con la calidad y la supervisión de los alimentos entregados a escolares.
En esa línea, Bustamante expresa preocupación por la mala gestión del programa de alimentación escolar, destacando que, aunque se han iniciado investigaciones judiciales, no es suficiente esperar solo a que avance el proceso judicial.
Subrayó que es fundamental que el propio programa y el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS) adopten medidas internas para mejorar los controles y la supervisión de los alimentos distribuidos.
Responsabilidad de funcionarios
Uno de los principales problemas señalados es la corrupción de algunos supervisores de planta, quienes, en lugar de velar por la calidad de los productos, han sido sobornados, lo que ha permitido que alimentos de mala calidad, como conservas adulteradas, lleguen a los niños.
Como se sabe, Cuarto Poder reveló la denuncia de una vendedora de Frigoinca sobre carne de caballo en lugar de carne de res en las conservas es uno de los casos mencionados.
En cuanto a la responsabilidad de los funcionarios, se discute si el viceministro y la ministra en su momento, Dina Boluarte, tuvieron conocimiento de los problemas en el programa.
La responsabilidad de la calidad de los alimentos recaería en los funcionarios encargados de la supervisión, pero también en los directores ejecutivos de los programas, quienes son nombrados por el ministro y el presidente de la República.
En este sentido, se considera que, si no se supervisó adecuadamente, hay una responsabilidad por omisión en cuanto a las funciones.
Se señala que en los últimos años ha habido una alta rotación de directores ejecutivos en el programa de alimentación escolar, lo que ha generado inestabilidad y falta de comprensión en la gestión, lo que afecta la confianza de los padres y la calidad del servicio.
Finalmente, Bustamante hace un llamado a que el gobierno y las autoridades actúen con urgencia para garantizar que los más de cuatro millones de niños beneficiarios del programa reciban alimentos de calidad, y que los responsables de estos delitos sean identificados y sancionados.