Argentina desarticula célula del Tren de Aragua

La ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, anunció la captura de una célula activa del Tren de Aragua. El operativo, coordinado por la Policía Federal, la Agencia Federal de Inteligencia y la Interpol, permitió la detención de doce integrantes que se dedicaban al lavado de dinero.

Según Bullrich, los fondos movilizados por esta red alcanzaban los 1.200 millones de pesos argentinos, con origen en actividades delictivas violentas. El caso refuerza la preocupación por la expansión del Tren de Aragua fuera de Venezuela y su presencia creciente en varios países sudamericanos.

Argentina los califica como organización terrorista

La ministra explicó que el gobierno argentino ha declarado oficialmente al Tren de Aragua como organización terrorista, debido a la gravedad de sus actos: atentados con armas de fuego en supermercados, carnicerías y ferreterías, que dejaron víctimas fatales.

Estas acciones, señaló, no solo generan inseguridad, sino que forman parte de un esquema planificado de terror y control territorial que busca expandirse internacionalmente.

Lavado de dinero como principal actividad en el país

Bullrich detalló que el principal objetivo de esta célula en Argentina era blanquear fondos obtenidos a través de actividades ilegales. "Quisieron utilizar a nuestro país como un sistema fácil para lavar dinero", declaró. A través de empresas fachada y transacciones ficticias, la red intentó legalizar recursos provenientes del crimen organizado.

La ministra afirmó que el gobierno persigue el lavado de activos con "absoluta seriedad" y que este operativo es una señal clara de su política de tolerancia cero.

Difusión del terror mediante redes sociales

Uno de los elementos más preocupantes mencionados por la ministra fue el uso de redes sociales por parte de la organización criminal para difundir imágenes de sus acciones violentas. Esta estrategia, dijo, forma parte del mecanismo de intimidación y propaganda del Tren de Aragua.

El operativo ha sido calificado como un paso fundamental en la lucha contra el crimen transnacional y el terrorismo en la región. La investigación sigue en curso para identificar posibles ramificaciones de la red.