Ataque ruso en Ucrania deja un niño muerto y cortes de energía

Además de las víctimas fatales y heridos, el ataque ruso en Ucrania provocó incendios en edificios residenciales, lo cual obligó a la evacuación de al menos 20 personas.
Un nuevo ataque ruso en Ucrania dejó al menos un menor fallecido, varios heridos y severos daños en la infraestructura energética. Las operaciones, que incluyeron el uso de drones y misiles, se dirigieron contra instalaciones estratégicas en Kiev, Zaporiyia y otras regiones del país.
La ofensiva se produjo en la madrugada del viernes 10 de octubre, generando cortes de luz, agua y gas en zonas residenciales.

Ofensiva con drones y misiles
La Fuerza Aérea de Ucrania confirmó que Rusia ejecutó un ataque masivo con drones de combate y misiles balísticos, afectando principalmente a regiones del este y centro del país. La ofensiva tuvo como blanco instalaciones críticas del sistema energético.
En la ciudad de Zaporiyia, se reportó la muerte de un niño de siete años, así como al menos tres heridos más durante la noche. En la capital, Kiev, nueve personas resultaron lesionadas tras el impacto de proyectiles en un edificio residencial.
Efectos en la capital ucraniana
Durante las primeras horas del día, varias zonas del este de Kiev quedaron completamente a oscuras. El alcalde Vitali Klitschko informó que se registraron fallas en el suministro de electricidad y agua, tras los ataques dirigidos contra infraestructura esencial.

Según la administración municipal, se interrumpió incluso el servicio de metro en la margen oriental del río Dniéper, como medida preventiva. Un corresponsal internacional que reside en la capital constató que la parte oriental de la ciudad quedó sin luz ni agua potable, en medio de una densa oscuridad.
Afectación al sistema energético nacional
El Ministerio de Energía de Ucrania informó que los ataques han sido dirigidos específicamente a la infraestructura energética nacional. Se confirmó la interrupción del servicio en varias regiones del país. En Kiev, Zaporiyia y otras zonas afectadas, las autoridades locales trabajan para restablecer los servicios básicos.
Las ofensivas se producen mientras Ucrania se prepara para la llegada del invierno, en una coyuntura crítica donde la disponibilidad de recursos como la electricidad y el gas resulta vital para la población.
Evacuación y consecuencias en zonas residenciales
Además de las víctimas fatales y heridos, el ataque ruso en Ucrania provocó incendios en edificios residenciales, lo cual obligó a la evacuación de al menos 20 personas por parte de los bomberos. Las autoridades indicaron que continúan monitoreando los efectos colaterales del ataque en otras zonas del país.
Los reportes de emergencia se multiplicaron durante la madrugada, lo que obligó a reforzar las alertas antiaéreas y las medidas de resguardo civil en distintos sectores urbanos.

Respuesta de las fuerzas ucranianas
Como parte de sus propias operaciones, las fuerzas ucranianas realizaron ofensivas contra posiciones rusas. Uno de los incidentes más destacados fue una fuga de amoníaco en un oleoducto en la región de Donetsk, considerada una acción para frenar el avance de tropas enemigas.
La respuesta ucraniana forma parte de una estrategia defensiva continua que busca contener la escalada de ataques dirigidos a su infraestructura crítica.
Posición del presidente Zelenski
El presidente Volodimir Zelenski calificó los ataques como una estrategia para generar inestabilidad. En declaraciones previas, acusó a Rusia de buscar “sembrar el caos” mediante la multiplicación de bombardeos contra instalaciones clave del país.
Tras la reciente ofensiva, Zelenski confirmó que las operaciones de defensa se mantendrán activas y reiteró el compromiso de su gobierno con la protección de la población civil ante una amenaza constante.
Escalada de ataques antes del invierno
Desde el inicio de la guerra en febrero de 2022, los ataques rusos se han centrado en destruir infraestructura crítica, una táctica que se intensifica a medida que se aproxima el invierno. El objetivo ha sido reducir la capacidad operativa del país y generar presión social mediante la escasez de recursos básicos.
El actual ataque ruso en Ucrania se enmarca en esa lógica, afectando directamente a miles de hogares ucranianos, especialmente en las zonas más frías y densamente pobladas.
Rusia lanzó un ataque con drones y misiles contra Ucrania, provocando la muerte de un niño de siete años en Zaporiyia y al menos nueve heridos. El bombardeo afectó infraestructura energética en Kiev y otras regiones, dejando zonas sin luz, gas ni agua. El servicio de metro fue suspendido y se evacuaron residencias por incendios. El presidente Zelenski confirmó que continuarán las operaciones defensivas. El Ministerio de Energía denunció un ataque dirigido a instalaciones críticas. Ucrania respondió con ofensivas en Donetsk. La ofensiva ocurre a pocas semanas del invierno y refuerza la tensión militar en el frente oriental.