Conoce cuánto es lo que ganan en total nuestros congresistas de la República

Son las 3 de la tarde del viernes 10 de marzo. Un día laborable para cualquier peruano de a pie. La sala Miguel Grau del Congreso de la República, en cambio se encuentra vacía, silla tras silla desocupada, con una cámara que apunta a la única congresista presente en una sesión, supuestamente, importante.  

Se trata de la presidenta de la comisión de Trabajo, Sigrid Bazán. La integran 21 congresistas, pero no hay nadie. Marcan asistencia, pero todavía prefieren la virtualidad. 

Pero lo que no está en el plano de la virtualidad son los acuerdos en el Congreso que muestran los ingresos reales de los congresistas, más allá de los 15 mil 600 soles que tienen como remuneración mensual. 

Hoy Cuarto Poder, presenta una radiografía de los ingresos que el fisco peruano abona en la cuenta de cada uno de los 130 congresistas de la República. Montos que en algunos casos no tienen un control de gastos. 

El vocero de la bancada Alianza Para el Progreso, Alejandro Soto, parece no haber revisado el total de sus ingresos. Un congresista de la República recibe pagos por diversos conceptos, remuneración, asignación por función congresal, apoyo logístico para la semana de representación, gastos de instalación, gratificaciones y bonificaciones extraordinarias. Es decir, cada padre la patria puede llegar a percibir hasta 360 mil 621 soles de ingresos brutos al año. 

Como cada inicio de legislatura, en el primer Pleno del Congreso se suele debatir los temas más urgentes e importantes del país a la espera de una votación. Pero aquel viernes 3 de marzo, más de un tercio de los congresistas no estuvieron en su curul. De los 130, sólo 79 marcaron asistencia, aunque muchos conectados a una plataforma virtual, y 41 estuvieron ausentes.

Ese día y muchos otros la congresista, Heidi Juárez también optó por la virtualidad. Hoy, al igual que otros colegas está inmersa en denuncias por el supuesto recorte de sueldo a trabajadores, pese a su abultada remuneración. Austeridad que no debe confundirse con lo que realmente perciben los parlamentarios. Aquí los números son fundamentales para resolver una serie de incógnitas. 

El importe de remuneración de un congresista es 15 mil 600 soles. Pero además recibe una asignación por función congresal de 7 mil 617 soles y un apoyo logístico para la semana de representación de 4 mil soles. En total, percibe un ingreso bruto mensual de 27 mil 217 soles. 

Este es un caso atípico en el Congreso. La remuneración de 15 mil 600 soles se encuentra afecta a la renta de quinta categoría y a los aportes de AFP. Con descuentos, 10 mil 196 soles se abonan a las cuentas bancarias de los congresistas.  Lo que no aparece en las boletas, pero todos los meses se cobran religiosamente son las asignaciones llamadas “Desempeño de función congresal por 7600” y “Apoyo logístico para la semana de representación por 4 mil soles más”. Ambos ingresos con el descuento de ley suman 8 mil 900 soles. Casi 9 mil soles al bolsillo de los congresistas que no están sujetos a rendición.

Mil quinientos soles era lo que ganaba el congresista Segundo Montalvo como mototaxista en Amazonas. Hoy sus ingresos se han multiplicado por 20.  Desde que se mudó a Lima usa la asignación por función congresal para pagar casa, comida y la movilidad que lo lleva al Congreso, aunque asegura que de su sueldo también salen otros gastos.

Este programa solicitó por transparencia al Congreso de la República la lista de ingresos mensuales de los parlamentarios de octubre de 2022 a febrero de 2023. Las cifras señalan claramente que solo de octubre a diciembre del año pasado, los congresistas recibieron cerca 63 mil 300 soles de sueldo, gratificaciones y bonificación extraordinaria de la Ley 30334. Además de una generosa tarjeta navideña por mil 700 soles más. 

Congresistas que hoy debutan en la política como Tania Sánchez, Isabel Cortez y Segundo Montalvo han recibido sus ingresos puntualmente cada mes. 

En el caso de los exministros Betsy Chávez y Roberto Sánchez, hoy al borde del desafuero por el golpe de Estado, volvieron a recibir ingresos como congresistas desde diciembre del año pasado. Ambos han recibido asignaciones por función congresal y viajes de representación, aunque en la práctica a Betsy Chávez la hemos visto pocas veces en el Congreso.  

Sánchez, congresista por Lima, asegura que los dos mil 800 soles para los gastos de la semana de representación están más que justificados.  

Solo uno ha renunciado a los dos mil 800 soles por concepto de apoyo logístico. José Luna, congresista de Podemos Perú ya no recibe ese monto, aunque sí todo lo demás. 
Además del sueldo, asignación por función congresal y apoyo logístico para la semana de representación, cada congresista recibe dos gratificaciones al año, un sueldo de 15 mil 600 soles para los gastos de instalación y dos bonificaciones, en julio y diciembre de mil 404 soles cada una. 

¿Cuánto dinero representan estos ingresos al año? Sabemos ya que cada congresista percibe un ingreso bruto mensual de 27 mil 217 soles. Si lo multiplicamos por 12 meses nos sale 326 mil 604 soles al año. A este monto se le suma, además, 31 mil 200 soles por concepto de las dos gratificaciones en julio y diciembre; y 2 mil 808 soles de dos bonificaciones extraordinarias. El total de ingresos brutos al año es 360 mil 612 soles. Esto significado, que la suma de todos sus ingresos representa un monto de 30 mil 51 soles cada mes. Plata como cancha supuestamente al servicio de la nación. 

Lo que no es personal ni privado son los otros beneficios al alcance de los congresistas, 48 pasajes anuales (ida y vuelta) a cualquier lugar del país y en cualquier aerolínea sin tener que justificar su uso, e incluso fuera de la semana de representación. Asignación de pasajes internacionales previo acuerdo de la mesa directiva, asignación de viáticos para viajes al extranjero, póliza de asistencia médica familiar y hasta préstamo de vehículos cuando el del congresista se va a mantenimiento. ¿Los que vienen serán mejor que ellos? Una pregunta que parece capciosa en medio de la crisis que hoy vive el Congreso.