Javier Llaque, exjefe del INPE: "No hay crisis penitenciaria"
El exjefe del INPE entregó su cargo y defendió la labor del personal pese a las limitaciones del sistema carcelario

Tras la reciente fuga de un interno del penal de Lurigancho, el exjefe del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Javier Llaque presentó su renuncia y descartó que exista una crisis penitenciaria en el país.
En una entrevista concedida al programa Al Final del Día de Canal N, destacó el esfuerzo del personal de seguridad y pidió no politizar el tema, señalando que la fuga no representa el colapso del sistema carcelario.
“A nosotros nos ha impactado la fuga, a los ciudadanos, a los vecinos, pero se politiza el tema. Se habla de una crisis penitenciaria. Yo la niego enfáticamente”, dijo en Al Final del Día de Canal N.
“El penal de Lurigancho fue entregado en 2017 por una fuga en gestión de la policía. En ocho años no ha habido una fuga. ¿Eso implica que todo el sistema esté en crisis? El año pasado hemos tenido una fuga, no del penal, sino de un hospital. Eso demuestra que hay un control de la cárcel a pesar de las vulnerabilidades. No hay cárcel invulnerable”, agregó.
"No existe cárcel invulnerable"
Durante su intervención, el funcionario recordó que el penal de Lurigancho fue entregado al INPE en 2017, y desde entonces se han tomado medidas para evitar incidentes de este tipo. Resaltó que en ocho años no se había registrado ninguna fuga hasta el reciente caso. Asimismo, rechazó las críticas que señalan una crisis en el sistema penitenciario y sostuvo que los casos de fuga son excepcionales y no deben generalizarse.
“El penal de Lurigancho fue entregado en 2017 por una fuga en gestión de la policía. En ocho años no ha habido una fuga. ¿Eso implica que todo el sistema esté en crisis? El año pasado hemos tenido una fuga, no del penal, sino de un hospital. Eso demuestra que hay un control de la cárcel a pesar de las vulnerabilidades. No hay cárcel invulnerable”, destacó.
Reconocimiento al personal y nuevas medidas
El exjefe del INPE reconoció las limitaciones del sistema, como el hacinamiento y la escasez de recursos, pero resaltó el compromiso del personal de seguridad, a quienes calificó como “héroes anónimos”. Aseguró que, pese a las vulnerabilidades, el control carcelario se mantiene.
Informó además que se tomarán nuevas medidas para evitar que se repitan situaciones como la ocurrida, y llamó a la ciudadanía a no dejarse llevar por discursos que busquen politizar lo ocurrido.