UNICEF: José Vásquez destaca lecciones tras 55 años de Yungay

José Vásquez, coordinador de emergencias de UNICEF, rememora el terremoto de Yungay y subraya la importancia de priorizar a la niñez en situaciones de desastre
A 55 años del devastador terremoto que sepultó Yungay, José Vásquez, coordinador de emergencias de UNICEF en Perú, rememora la tragedia y destaca las lecciones aprendidas en la atención a la niñez durante emergencias.
El 31 de mayo de 1970, un sismo de magnitud 7.9 y el posterior aluvión del nevado Huascarán causaron la muerte de aproximadamente 70,000 personas, dejando a miles de niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad.
UNICEF, presente en Perú desde 1950, brindó asistencia inmediata tras el desastre, enfocándose en las necesidades de los menores afectados.
La organización proporcionó equipos médicos, unidades de generación eléctrica, mantas y medicamentos, y colaboró con el gobierno peruano en la instalación de espacios educativos temporales para garantizar la continuidad del aprendizaje y apoyo emocional a los niños sobrevivientes.
¿Cómo ha evolucionado la gestión de emergencias en Perú desde Yungay?
Desde la tragedia de Yungay, Perú ha avanzado en la institucionalización de la gestión de riesgos. En 1972 se creó el Sistema Nacional de Defensa Civil, y en 2011 se estableció el Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (SINAGERD), con un enfoque preventivo y de reducción de riesgos.
UNICEF ha trabajado de la mano con estas instituciones para asegurar que las políticas públicas consideren las necesidades específicas de la niñez y adolescencia en contextos de emergencia.
Vásquez enfatiza que, aunque se han logrado avances, persisten desafíos, especialmente en zonas rurales y amazónicas, donde las inundaciones recurrentes afectan la infraestructura educativa y sanitaria, interrumpiendo el desarrollo integral de los menores.
¿Cuál es el rol actual de UNICEF en la atención a emergencias en Perú?
UNICEF continúa su labor en Perú, enfocándose en la preparación y respuesta ante desastres naturales. La organización trabaja en la implementación de programas de prevención, capacitación de comunidades y fortalecimiento de sistemas de protección infantil.
Además, en situaciones de emergencia, proporciona kits de higiene, apoyo psicosocial y establece espacios seguros para niños y adolescentes.
Vásquez destaca que la participación activa de la comunidad y la articulación con las autoridades locales son fundamentales para garantizar una respuesta efectiva y centrada en la protección de la niñez.
A 55 años del terremoto de Yungay, la experiencia adquirida ha sido crucial para mejorar la gestión de emergencias en Perú. UNICEF, a través de su labor continua, reafirma su compromiso con la protección y el bienestar de los niños y adolescentes, especialmente en contextos de desastre.