Trump y Putin se reúnen en Alaska en un nuevo escenario global

Trump y Putin se reúnen en Alaska para tratar la guerra en Ucrania y el futuro de la relación entre EE. UU. y Rusia
Donald Trump y Vladimir Putin sostienen este viernes una reunión en Alaska en un contexto político y geopolítico muy distinto al de su último cara a cara en 2018. Según fuentes de la Casa Blanca, el encuentro busca explorar un posible acuerdo para poner fin a la guerra en Ucrania, aunque ambos mandatarios llegan con posiciones marcadamente opuestas.
Trump, ahora más proteccionista y enfocado en el poder de los aranceles para influir en otros países, recibe a un Putin respaldado por China y en un bloque internacional distinto al de hace siete años. La cumbre se realiza sin líderes europeos y bajo el formato “tres a tres”, con funcionarios de alto nivel de cada gobierno acompañando a los mandatarios.
Guerra en Ucrania, eje central de la negociación
De acuerdo con analistas, Moscú pretende consolidar el control sobre territorios ocupados en Ucrania y frenar de manera definitiva el ingreso de ese país a la OTAN. Por su parte, Estados Unidos busca que Rusia acepte un alto al fuego y acuerdos que respeten compromisos internacionales previos.
Las condiciones impuestas por el Kremlin han sido rechazadas por Kiev y sus aliados occidentales, que insisten en no dar marcha atrás en el camino de Ucrania hacia la integración euroatlántica. Según el portavoz del Kremlin, había un 25 % de posibilidades de que la cumbre fracasara incluso antes de iniciarse.
Riesgos y repercusiones para Estados Unidos
Recibir a Putin en suelo estadounidense implica un riesgo político para Trump, ya que otorga visibilidad internacional a un líder que ha estado en aislamiento diplomático desde la invasión a Ucrania. La cita se enmarca, además, en un momento en el que Washington intenta equilibrar su papel como mediador con la necesidad de mantener el respaldo de sus aliados.
Putin llegó a Alaska tras una escala en Magadán, donde visitó una planta de producción de aceite de pescado y revisó informes sobre Ucrania, tensiones bilaterales y cooperación económica.
Perspectivas de la cumbre
Aunque la posibilidad de un acuerdo inmediato es baja, Trump ha planteado que, si hay avances, podría organizar una reunión posterior en la que también participe el presidente ucraniano Volodímir Zelenski. Esto abriría una vía diplomática más amplia, aunque por ahora el Kremlin insiste en que cualquier pacto debe incluir sus demandas estratégicas y no solo un cese temporal de hostilidades.
El resultado de la reunión podría conocerse en las próximas horas. La expectativa internacional se centra en saber si este diálogo directo podrá sentar las bases para un proceso de paz más amplio o si, como advierten varios observadores, terminará siendo un gesto político sin efectos concretos.