Alberto Otárola: La cronología de su caída como jefe de Gabinete

Fue el epílogo de una crisis de tres días. A más de seis mil kilómetros, en Toronto, Alberto Otárola tenía que lucirse en el foro minero más importante del mundo y no fue así. El escándalo de un audio generó una crisis ministerial.

Era la primera vez que, desde Palacio de gobierno, se sabía que la presidenta Dina Boluarte estaba decidida a aceptar la renuncia de su amigo, su abogado y mano derecha durante catorce meses de gestión. La vocera de sus primeras decisiones fue la ministra de la Mujer.

Mientras Otárola coordinaba su apresurado retorno, ya se barajaban nombres, ya existía una terna de posibles reemplazantes: Hania Pérez de Cuellar, Marisol Espinoza, Eduardo Arana y Julio Demartini. Ninguna explicación del entonces premier sería suficiente para mantenerse en el cargo.

El vuelo de retorno no fue rápido. Viajó de Canadá a México y de México a Lima a las cinco de la tarde del martes, seguridad del Estado ya lo esperaba en los counters de migraciones, ya tenían programado para él una vía de salida que lo alejaría de la prensa y lo llevaría directamente hasta palacio de gobierno.

A Alberto Otarola lo esperaba la presidenta, quien estaba acompañada del ministro de Justicia, Eduardo Arana. Él fue testigo de la conversación entre la mandataria y el entonces premier, en ese momento la carta de renuncia era básicamente un formalismo.

Desvincularlo de la crisis

El escándalo, para disgusto de la mandataria, había alcanzado también a su hermano Nicanor Boluarte. La defensa de Yaziré Pinedo colocaba a Nicanor Boluarte en una pugna de poder contra Alberto Otárola, quien buscó desvincularlo de esta crisis.

Ahora lo reemplaza Gustavo Adrianzén, un hombre cercano a él desde el gobierno de Ollanta Humala. Un funcionario que fue nombrado representante permanente del Perú ante la OEA, mientras Otárola era premier.