Irán enfrenta limitaciones para cerrar el estrecho de Ormuz

Óscar Vidarte explicó que Irán enfrenta restricciones estratégicas y diplomáticas para cerrar el estrecho de Ormuz, además de depender del apoyo de China
El internacionalista Óscar Vidarte señaló que Irán enfrenta diversos factores que dificultan una eventual decisión de cerrar el estrecho de Ormuz. Según explicó, esta medida tendría consecuencias económicas y diplomáticas para Teherán, especialmente por el tipo de relaciones estratégicas que mantiene con países clave de la región y con China.
Durante una entrevista con el programa Pasos Perdidos, Vidarte indicó que por el estrecho de Ormuz transita aproximadamente el 20% del comercio mundial de petróleo y gas. Este corredor marítimo también es clave para el suministro de crudo hacia China, lo cual vuelve a ese país un actor central en la estrategia internacional de Irán.
El rol estratégico de China en el contexto actual
Según Vidarte, Irán no buscaría poner en riesgo su relación con China, país al que considera fundamental para mantener su posición en caso de un conflicto prolongado. China representa un posible respaldo político y económico ante eventuales sanciones o presiones internacionales, por lo que conservar esa alianza resulta prioritario.
Además, Vidarte remarcó que muchos de los envíos de petróleo que circulan por el estrecho de Ormuz tienen como destino a China, lo cual incrementa la sensibilidad del tema. Cualquier interrupción en la zona podría generar reacciones incluso de aliados circunstanciales de Irán.
Riesgo de perder apoyos regionales si se cierra el paso marítimo
El internacionalista también advirtió que una acción como el cierre del estrecho podría afectar el respaldo discursivo que Irán ha recibido de países como Catar, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita. Estos países exportan petróleo y gas a través de esa vía marítima, por lo que un cierre podría provocar un giro en sus posturas hacia Irán.
Vidarte enfatizó que esta situación representa una limitación diplomática importante para el gobierno iraní, dado que el impacto afectaría directamente a socios regionales que han mostrado cierta cercanía en el plano político.
Rusia no podría brindar apoyo efectivo a Irán
En otro momento de su intervención, Óscar Vidarte explicó que Rusia no estaría en condiciones de apoyar a Irán ante una escalada de tensiones. Esto se debe a que actualmente se encuentra involucrada en el conflicto armado con Ucrania, lo cual limita su capacidad de intervención en otros escenarios internacionales.
Vidarte indicó que esta limitación hace que el respaldo de China cobre aún más importancia, ya que sería el principal actor con posibilidad de influir en el contexto internacional en favor de Irán.
Resistencia ante ataques prolongados
El internacionalista también se refirió al escenario de ataques sostenidos contra Irán, señalando que, con apoyo externo, podría enfrentar un conflicto de larga duración. Para ello, tomó como referencia el caso de Ucrania, que ha resistido una guerra con Rusia durante más de tres años con el respaldo de potencias occidentales.
De acuerdo con Vidarte, Irán es considerado una potencia regional en Medio Oriente y, en ese sentido, tendría capacidad de soportar una situación similar si contara con apoyo internacional.