Penal de Trujillo: policías e INPE cobraban por ingreso de droga

Un escándalo sacude al penal El Milagro de Trujillo. Policías en actividad y agentes del INPE habrían convertido la prisión en un centro de negocios ilícitos, facilitando el ingreso de drogas, celulares y cobrando a los internos por privilegios.

Interceptaciones telefónicas, autorizadas por la Fiscalía de Crimen Organizado, revelan cómo la suboficial PNP Elidía Díaz Carmelino pactaba con un reo el ingreso de paquetes ilegales. "¿Estás operativa?", le pregunta el interno. "Toda la vida, mano", responde ella sin titubear.

Otro audio compromete a John Elvin Pacherres Esquen, agente del INPE, quien detalla cómo trabaja con la suboficial Díaz para el ingreso de objetos prohibidos. "Ella es la que me tiene mis cosas ahorita", le confiesa a un recluso.

Videos evidencian cobros y entrega de drogas

Las pruebas no solo son auditivas. Videos grabados por la Policía muestran a un agente de vigilancia recibiendo un paquete desde el exterior del penal y entregándolo a un interno. Otra grabación capta a un trabajador del INPE cobrando dinero a los presos, un cobro ilegal que quedó registrado en video.

Según la investigación, el penal operaba bajo una estructura de sobornos:

•     S/ 200 por un audífono.
•     S/ 250 a S/ 300 por un cargador.
•     S/ 5,000 para evitar ser trasladado.
•     S/ 3,000 a S/ 4,000 por el ingreso de celulares.

La red de corrupción era amplia, involucrando a funcionarios de distintos niveles. Entre los investigados están la suboficial Elidía Díaz Carmelino, el agente penitenciario John Pacherres Esquen y el director del penal, Carlos Franco Medina.

Funcionarios en la mira, pero aún en funciones

A pesar de las pruebas, Elidía Díaz sigue trabajando en la Policía Nacional. Cuando fue confrontada sobre los audios, negó su participación y dijo que todo es un "malentendido". Sin embargo, documentos oficiales indican que en 2020 fue sancionada por permitir el ingreso de artículos prohibidos a un penal.

El Ministerio Público ha confirmado que la organización criminal "Los Imperdonables" operaba dentro del penal con la complicidad de policías y personal del INPE. Un operativo reciente permitió la intervención de cinco celdas y 14 inmuebles en Trujillo, Lima y Chiclayo.

Las pruebas están sobre la mesa: audios, videos y documentos que demuestran que la corrupción dentro de los penales sigue operando sin castigo. La gran pregunta es: ¿hasta cuándo?