Bolsonaro reaparece y niega intento de golpe de Estado
El exmandatario brasileño enfrenta acusaciones por intento de golpe y organización criminal. En una multitudinaria manifestación, negó los cargos y dijo estar listo para “cambiar el destino de Brasil”.

El expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, reapareció en público este fin de semana durante un mitin masivo en la emblemática avenida Paulista, en Sao Paulo, donde congregó a miles de simpatizantes. Allí se declaró víctima de una persecución política y aseguró que está preparado para “cambiar el destino de Brasil”.
Su intervención se produce mientras enfrenta un proceso judicial que podría derivar en una condena de hasta 40 años de prisión por intento de golpe de Estado y liderazgo de una organización criminal.
Vestido con los colores de la bandera brasileña y rodeado de seguidores que portaban biblias, banderas y pancartas, Bolsonaro reafirmó su inocencia y rechazó todas las acusaciones. “Lógicamente no quiero que me arresten ni que me maten, pero no puedo eludir mi responsabilidad”, expresó ante la multitud.
Acusaciones por golpe y organización criminal
Bolsonaro es señalado por la Fiscalía de Brasil como el cabecilla de una red que presuntamente intentó mantenerlo en el poder tras su derrota electoral en 2022 frente a Luiz Inácio Lula da Silva. Según las investigaciones, el plan de desestabilización incluyó acciones para proclamar un estado de sitio, la detención de autoridades y, en una de sus hipótesis más graves, el posible asesinato de Lula. No obstante, la falta de respaldo de las Fuerzas Armadas habría frustrado la ejecución del golpe.

“El 8 de enero no hubo un golpe. ¿Un golpe con ancianos, mujeres y banderas en la espalda? ¡Un golpe se da con las Fuerzas Armadas y armamentos!”, declaró Bolsonaro durante el mitin, en referencia a los disturbios protagonizados por sus simpatizantes en la sede de los tres poderes en Brasilia.
Las autoridades brasileñas ya han iniciado el juicio correspondiente. Se trata del primer proceso judicial en la historia del país contra un expresidente por intento de golpe de Estado.
Mitin tras recuperación médica
La reaparición de Bolsonaro también marca su retorno a la actividad pública luego de una compleja cirugía por una obstrucción intestinal que lo mantuvo internado por tres semanas en el hospital DF Star de Brasilia. La intervención, realizada el 13 de abril, fue la séptima desde que en 2018 fuera apuñalado en plena campaña electoral.
A su salida del hospital, el exmandatario expresó sentirse “renovado” y adelantó su participación en movilizaciones políticas. En efecto, pocos días después, convocó a un acto en favor de una ley de amnistía para los detenidos por los hechos del 8 de enero de 2023, quienes aún enfrentan procesos judiciales.
Defensa legal insiste en inocencia
El abogado de Bolsonaro, Celso Villardy, ha sostenido que su cliente “no cometió ningún acto que pudiera ser criminalizado”. De acuerdo con su versión, todas las acciones del expresidente se enmarcaron dentro de la legalidad y fueron una respuesta a las presiones sociales surgidas tras las elecciones.

Además, Bolsonaro ya ha declarado ante el Supremo Tribunal Federal, donde negó haber planificado el golpe de Estado. Durante su testimonio, sostuvo que nunca hubo conversaciones con los comandantes militares para alterar el orden democrático y se presentó con una copia de la Constitución en la mano para reforzar su defensa.
“No actué fuera del marco legal. Un golpe es algo abominable. De mi parte y de los comandantes, nunca se habló de eso”, aseguró.
Impacto político y futuro incierto
Aunque actualmente se encuentra inhabilitado para postular a cargos públicos, Bolsonaro ha expresado en múltiples ocasiones su deseo de regresar al poder en 2027. Su estrategia parece combinar la defensa jurídica en los estrados con un reposicionamiento político a través de movilizaciones públicas, donde aún conserva una base de apoyo significativa.
El juicio en su contra avanza, y se prevé que el veredicto sea conocido antes de las próximas elecciones presidenciales. De ser hallado culpable, Bolsonaro podría enfrentar hasta cuatro décadas de prisión, un escenario que lo dejaría fuera del juego político de manera definitiva.
Contexto de polarización y apoyo popular
La manifestación en Sao Paulo evidenció que, pese a las investigaciones judiciales en curso, el liderazgo de Bolsonaro sigue vigente en ciertos sectores del electorado brasileño. Las arengas de “mito” y “Bolsonaro 2027” se repitieron durante el evento, lo que indica que su base política mantiene la esperanza de una eventual candidatura, incluso si esta depende de una amnistía o de decisiones judiciales favorables.

En paralelo, la sociedad brasileña continúa dividida. Mientras sectores ven en Bolsonaro a un perseguido político, otros lo consideran responsable directo de uno de los mayores intentos de quebrar el orden democrático desde la redemocratización del país.